París apoya a la extrema derecha en Córcega, según Simeoni
El líder de Unión del Pueblo Corso (UPC), Edmond Simeoni, en una conferencia de Prensa celebrada ayer en un gran hotel parisiense, se responsabilizó de la violación del secreto de instrucción de las autoridades judiciales relativo a los autonomistas corsos detenidos, para probar la «colaboración de las autoridades francesas con el movimiento de extrema derecha Francia. Así ha podido saberse. oficialmente que ese grupo ha cometido 47 atentados en la isla contra los autonomistas.
Las revelaciones de Simeoni arrancan de los graves acontecimientos (tres muertos) acaecidos a principios de 1980 en la ciudad de Bastelica y en un hotel de Ajaccio. Un grupo de militantes de la UPC ocupó la alcaldía del pueblo indicado y, más tarde, el hotel. Desde entonces, diecisiete autonomistas se encuentran encarcelados en París.
El estado de salud de seis de ellos es serio actualmente, porque hace una huelga de hambre. Simeoni ha querido alertar a la opinión pública, y para ello reveló como un «proceso verbal» oficial las declaraciones del jefe de Francia, el comandante Bertolini, jefe de uno de los servicios de la prefectura corsa.
Bertolini, que fue encarcelado y liberado poco después, confiesa haber creado el movimiento antiautonomista en 1975, acredita 47 atentados en la isla y corrobora que diez militantes de ese grupo, como él mismo, pertenecen al movimiento gaullista RPR. Por todo ello, Simeoni responsabiliza a las autoridades francesas de la «grave tensión en Córcega».
Recientemente, el ministro del Interior, Christian Bonnet, dejó entender claramente que la violencia en la "isla de la belleza» estaba financiada por Libia. Simeoni anunció que su partido, autonomista, se ha dirigido a Amnistía Internacional, al Tribunal Europeo de Justicia, a la Liga de los Derechos del Hombre y al Papa, para evidenciar «el origen oficial de la violencia».
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