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Denis Healey, favorito para suceder a Callaghan al frente del laborismo británico

El martes se conocerán los resultados de la primera vuelta de las elecciones para el liderazgo del Partido Laborista británico. Los favoritos siguen siendo Denis Healey y Michael Foot. Los sondeos indican que será necesaria una segunda votación el 10 de noviembre.Se piensa que dos tercios de los parlamentarios laboristas han depositado ya su voto. Un sondeo del programa de la BBC, Newsnight, mostraba en la noche del viernes que, en los 181 parlamentarios entrevistados, 82 pensaban votar por Healey; 54, por Foot; veintidós, por John Silkin, y dieciocho, por Peter Shore. El vencedor debe obtener una mayoría absoluta.

The Times daba a Healey como candidato favorito de las organizaciones locales del partido, y otros sondeos señalaban que los votantes laboristas preferían a Healey. El líder del partido es elegido por el grupo parlamentario y un congreso extraordinario; en enero deberá decidir un nuevo método de elección, ampliando el colegio electoral.

Entre los candidatos, John Silkin, ex ministro de Agricultura, de 57 años de edad, pertenece a la izquierda moderada del laborismo. Partidario de una retirada británica de la Comunidad Económica Europea, no es tampoco un entusiasta de la Organizacion del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Peter Shore, ex ministro de Comercio y del Medio Ambiente, un año de Silkin, gustaría de aplicar controles en los salarios y en las importaciones, favoreciendo una planificación socioeconómica centralizada. Atlantista, Shore tiene cierto peso entre la izquierda por defender la supremacía nacional frente a la CEE.

El último en entrar en esta contienda, socavando la postura de Shore, a quien había apoyado públicamente, fue Michael Foot. Este gran orador, de 67 años, ha sido calificado como el «último romántico» del Partido Laborista. Radical en sus ideas políticas y económicas, está a favor de la retirada negociada de la Comunidad Económica y de un desarme unilateral; ex ministro de Trabajo, tiene una gran influencia en el mundo sindical. En las últimas elecciones al liderazgo del laborismo, en 1976, batió a James Callaghan en la primera vuelta, siendo posteriormente derrotado.

La derecha moderada, socialdemócrata, está representada por Denis Healey, partidario de una política salarial, con un ligero toque de monetarismo, del Mercado Común y de la OTAN.

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