La sequía ha disminuido las defensas de las especies

Las posibilidades de caza aún no son las óptimas, pese a que ya van transcurridas tres semanas desde que se levantó la veda. La sequía ha mermado las defensas de las especies y de intensificar ahora la acción cinegética se corre el riesgo de que, mediada la temporada, ya no queden en el campo piezas sobre las que disparar.Las aves son, de momento, las más afectadas por la carencia de agua. La perdiz crió muy bien por el buen año agrícola y la casi, total ausencia de tormentas, veraniegas. Pero la prolongación de la sequía ha incidido negativamente, en el aprovechamiento de esta especie, dado que sus defensas disminuyen notablemente con las elevadas temperaturas y la escasez de zonas frescas y con hierba naciente donde dispersarse, En consecuencia, lo aconsejable es que se retrase su caza, pues ahora es una especie fácil de abatir y su número puede verse notablemente reducido con unas graves implicaciones pues para la próxima temporadá, quédarían menos ejemplares para la reproducción.

Grave daño a las aves acuáticas

Por lo que se refiere a las aves acuáticas, tras haber tenido agua y alimentación suficientes durante su período de cria para aquellas que nidifican en España, acusan ahora gravemente la sequía. Se encuentran concentradas en pequeñas lagunas y zonas encharcadas, que constituyen lugares privilegiados para aquellos titulares de cotos privados que aprovechan estas circunstancias para organizar grandes tiradas, aun cuando, por el estado de inmadurez de las aves y sus escasas defensas, sin haber alcanzado la muda total y brillantez de su plumaje característico, no presentan un gran interés cinegético. Por lo que respecta a la liebre, se encuentra en regresión debido principalmente a la caza furtiva. El conejo está estabilizado, dada su facilidad de reproducirse, a pesar de la mixornatosis, que sigue apareciendo, con mayor o menor virulencia, en todas las zonas de matorral o monte bajo.Precisamente, el conejo, casi con toda seguridad, no podrá cazarse el proximo año a partir del mes de junio en los cotos. Esto es algo que se venía haciendo para aprovechar la especie antes de que fuera atacada por la mixornatosis, pero el Icona ha estimado que esta autorización influye negativamente sobre el ciclo de reproducción de la codorniz, la tórtola y la paloma, ya que, al tratarse de aves migratorias, en muchos cotos se aprovecha el permiso de caza de conejos para disparar sobre ellas, sin que pueda sorprenderse estas infracciones por la escasez de vigilancia. Por otra parte, el hecho de que se produzcan disparos durante esa época aumenta el furtivismo, por la dificultad de distinguir si éstos se producen en cotos privados con la correspondiente autorización para la caza del conejo.

En consecuencia, es muy posible que se limiten estas autorizaciones para cazar conejos en época de veda o que incluso no se concedan. A lo sumo, se reglamentaría tan sólo su captura con lazos y cepos.

Por otra parte, en diversas provincias se está estudiando la posibilidad de reducir sensiblemente o suprimir el período de media veda, dado el grave perjuicio que se ocasiona al dispararse indiscriminadamente sobre otras especies, tales como la perdiz, conejo o liebre, sin que hayan alcanzado aún su estado adulto. Estas infracciones se cometen no sólo en los terrenos libres, sino también en los cotos privados.