La población civil iraní sufre las duras consecuencias de la guerra
La población civil de las ciudades del Juzestán iraní, principalmente Jorramshar y Abadán (en las que los combates con las fuerzas iraquíes han sido y son más encarnizados), están sufriendo física y psicológicamente las duras consecuencias de la guerra. Los bombardeos de la aviación y la artillería iraquíes -especialmente con cohetes tierra-tierra- se han llevado por delante múltiples vidas de mujeres y niños y han forzado el éxodo de los habitantes de las ciudades hacia regiones más seguras. Los campamentos de refugiados proliferan. Nuestro enviado especial en Teherán, Rafael Fraguas, ha recorrido la zona tan duramente castigada.Página 4
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.
