La Junta de Andalucía intenta mediar en la huelga de hambre de Marinaleda
El consejero de Interior de la Junta de Andalucía interrumpió ayer sus vacaciones para intentar aportar soluciones al conflicto iniciado en el pueblo sevillano de Marinaleda, en donde una gran parte de los vecinos cumplieron ayer su séptimo día de huelga de hambre. Ayer, la situación de algunos de los huelguistas empezaba a mostrar claros síntomas de agotamiento físico. El movimiento parece, entre tanto, extenderse parcialmente a otras localidades.
Varias personas han sufrido desmayos y otros síntomas de debilidad en Marinaleda, tras haber permanecido siete días en huelga de hambre, en protesta por la situación de desempleo forzoso que sufren los jornaleros andaluces, así como por la falta de atención del Gobierno hacia este problema.En otros pueblos de la provincia de Sevilla, grupos de trabajadores realizan encierros y huelgas de hambre por los mismos motivos. El consejero de Interior de la Junta de Andalucía ha interrumpido sus vacaciones para mediar en el conflicto, mientras los partidos políticos celebran reuniones urgentes para analizar la situación.
Más pueblos
Grupos de jornaleros continúan en huelga de hambre en los ayuntamientos de Osuna, Martín de la Jara, Aguadulce, Gilena y Los Corrales, secundando de esta forma la convocatoria realizada por el Sindicato de Obreros del Campo (SOC), cuyos presidente y secretario general han adoptado la misma actitud de protesta, permaneciendo ambos en huelga de hambre. En Herrera, unos doscientos trabajadores afiliados a Comisiones Obreras permanecen encerrados desde ayer en la Cámara Agraria. También continúan en huelga de hambre el grupo de cristianos de base de Morón. A este último grupo se han incorporado dos sacerdotes.
Ayer, a última hora, alrededor de veinte alcaldes y concejales integrados en la Candidatura Unitaria de Trabajadores (CUT) y en el SOC celebraron una reunión para decidir la estrategia a seguir en los próximos días. Aunque Francisco Casero, secretario general del SOC, adelantó a EL PAIS que las ocupaciones de fincas y las marchas de jornaleros sobre las ciudades andaluzas no se realizarán hasta la semana próxima, no cabe descartarse que la asamblea de alcaldes y sindicalistas opte por adelantar las acciones ante la falta de respuesta de Madrid. A la hora de cerrar esta edición todavía no se había llegado a ningún acuerdo, aunque Francisco Casero manifestó que «los ánimos estaban muy caldeados».
Mediación de la Junta
Durante la mañana de ayer, una comisión de alcaldes, entre ellos el de Osuna, del PSOE, visitaron al consejero del Interior, el socialista Antonio Ojeda, pidiéndole la mediación de la Junta en el conflicto. El consejero prometió hacer gestiones ante la Administración central, así como visitar los pueblos más afectados. Esta mañana es esperado en Marinaleda. De esta forma, la Junta de Andalucía, al margen de la crisis hasta el momento, interviene directamente. Antonio Ojeda ha recordado que la Junta está dando los últimos toques a un plan socioeconómico de urgencia para Andalucía, que, con una correcta aplicación, vendría a evitar el aumento del número de parados en la región y crearía puestos de trabajo en los sectores más afectados, como el agrícola y la construcción.
Los secretariados del PSOE de Andalucía y del Partido Comunista Andaluz, por su parte, han celebrado varias reuniones de trabajo, para analizar la situación. Representantes provinciales del PCA han visitado Marinaleda, mientras que el diputado comunista Fernando Pérez Royo, en su condición de parlamentario, se ha ofrecido para realizar cuantas gestiones estén de su mano. El gobernador civil continúa de vacaciones, aunque hay indicios de que mañana se reincorporará a su despacho oficial.
El calor agrava la situación
Al margen de la espectación suscitada en todo el país, e incluso en el extranjero, los setecientos vecinos de Marinaleda continúan adelante con su huelga de hambre, cuando los efectos se hacen sentir, especialmente en los trabajadores, que no abandonaron sus tareas laborales. La situación más delicada corresponde a un jornalero dedicado a las tareas de la remolacha y en huelga desde el primer día. El calor asfixiante que está haciendo estos días en la provincia sevillana contribuye a hacer más difícil la situación a los huelguistas. Ayer, ante la información publicada por los diarios Abc, de Madrid y de Sevilla, en la que se decía que sólo ochenta personas secundan la huelga de hambre, los vecinos, desoyendo los consejos del alcalde, decidieron volver a la Casa de la Cultura, abandonando sus viviendas particulares. El alcalde, que está visiblemente afectado a causa de su continua actividad, había aconsejado reposo y que los huelguistas permanecieran en sus casas, dada la falta de condiciones del salón de actos. Entre las numerosas muestras de solidaridad llegadas tanto de España como del extranjero, destaca la presencia del cantautor andalucista Carlos Cano, desplazado hasta Marinaleda. Entre las extranjeras, se ha observado a lo largo de estos días la presencia y el interés de algunos representantes de medios informativos de gran circulación en Europa, atraídos por el interés periodístico que el tema ha despertado en sus países, debido a la publicación de algunas noticias fragmentarias.
Una carta al prínc¡pe Felipe
Los niños de Marinaleda han escrito una carta que han enviado al príncipe Felipe, cuyo contenido transcribimos a continuación. (Se ha respetado en el texto, parcialmente, el estilo original de la misiva que habría sido enviada el pasado día 17 de este mes.)«Los niños de Marinaleda hemos tenido el gusto de contarte la situación en que se encuentra Andalucía y, en concreto, Marinaleda. Hace unos días, nuestros padres, en asamblea abierta, acordaron ponerse en huelga de hambre. Nosotros estamos en solidaridad con ellos. Llevamos ya varios días en huelga de hambre. ¿Por qué estamos en huelga de hambre? Estamos en huelga de hambre porque nuestros padres llevan ya seis meses viviendo de la limosna del empleo comunitario. Al pueblo no llegan ya ni doscientas pesetas diarias, pues algunos meses sólo trabajan dos días. Vivimos en la miseria, por lo que algunas familias tienen que pedir dinero a los vecinos, porque en las tiendas ya no les dan fiao. Ponte en nuestra situación y piensa: ¿Es justo que mientras que algunos niños están de vacaciones con sus padres y familias otros no sepan ni qué van a comer esa noche? ¿Es justo que mientras que unos niños tienen profesores particulares otros no puedan acudir ni a colegios estatales? ¿Es justo que mientras unos derrochan gran cantidad de dinero en juguetes y lujos otros no tengan ni unos zapatos que ponerse y tengan que andar descalzos?
Nosotros pensamos que no, y por eso nuestra huelga de hambre. Por eso que llevamos varios días sin comer y no vamos a hacerlo hasta que venga alguna solución, porque esta situación es insoportable. Y es más insoportable aún cuando se trata de una tierra tan rica como Andalucía.
Amigo: el problema de nuestra tierra es grave, y por eso vamos a seguir luchando al lado de nuestros padres. Vamos a seguir luchando porque el problema también es nuestro; porque piensa y contesta a estas preguntas. ¿Qué va a ser de nosotros? ¿Dónde está nuestro futuro? Tu futuro, nos imaginamos, estará resuelto, pero ¿y el nuestro?, ¿quién nos lo resuelve? No creas que esto es una historia, sino un hecho real que tu jamás conocerás. Desgraciadamente, esta miseria la vivimos nosotros, que somos los que daremos frutos a España el día de mañana. No intentamos con este resumen, que tal vez no llegue a tus oídos, que nos respondieras con algo que quizá nos dé soluciones. Pedimos, de todo corazón, que pienses, y quizá te dé coraje o lástima y tú o tus padres nos dierais soluciones. Perdona si estas palabras son fuertes, pero más fuerte es el hambre. Saludos de tus amigos. Marinaleda».
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