Problemas asociativos de los realizadores

El pasado fin de semana se constituyó en Madrid una asociación profesional de realizadores de televisión, que se ha definido como un «organismo de estricto carácter profesional, autónomo al margen de cualquier directriz sindical, estatal, de poder o de partido político».La convocatoria para la constitución de esta asociación, firmada por los realizadores Carlos Lemos, Pradera, Aguinaga y Arias, no fue comunicada por lo menos a treinta realizado,res, por lo que éstos se sintieron discriminados y enviaron un telegrama con el siguiente texto: «Realizadores excluidos convocatoria proyecto asociación denuncian intento división colectivo realizadores y pideii discútase asunto previa democrática convocatoria totalidad realizadores». Firmaban este telegrama los realizadores Pilar Miró, Cuerda, Mediavilla, Castellón, Yagüe, Llanos, Camba, Ripoll, Serrano, Gómez Redondo, Josefina Molina, Antonio Drove, Castro, Pasano, Giménez Rico, Martínez Lázaro, Hungría, Gómez Martín, Méndez Leite, Enciso, Montolíu, Alvarez, Jiménez Bescós, Abad, Villate, Ortega y Nicanor. Posteriormente se incorporaron al texto de telegrama los realizadores Crarcía de Dueñas y Alberto González Vergel.

El telegrama de los excluidos se leyó en la asamblea, y la explicación que dieron los organizadores de no haber convocado a estos treinta es: "No era necesario sabíamos, que no estaban. de acuerdo con esta asociación".

En esta asociación profesional de realizadores de televisión figuran, entre otros socios fundadores y miembros, Fernando García de la Vega, Valerio Lazarov, Cayetano Luca de Tena, Hugo Stuven, Ramón Díez, Enrique Martí Maqueda, Manuel Rato, Luis T. Melgar, Miguel de la Hoz, José María Morales, Gustavo Pérez Puig, Luis Leal, José Marín, José G. Terribas, Angel del Pozo, Adriano del Valle, Eugenio Pena, Joaquín Vera, Sastre y Anguita, entre otros.

La creación de esta asociación nace, según sus asociados, desde presupuestos profesionales «con una voluntad de servicio a las necesidades de una colectividad pluralista que no desea ver interferida su labor por intereses ajenos al propio medio televisivo». «El deseo de contar con una isociación con personalidad propia», dirían algunos asociados, «y capacidad jurídica total se basa únicamente en la necesidad de defensa y promoción de sus derechos y aspiraciones, profesionales. ante todo organismo, corporación o persona física o jurídica».

Algunos de los realizadores contrarios a esta asociación opinan, sin embargo, que bajo la apariencia de independientes se agrupan una serie de realizadores de ideologías conservadoras y hasta ultraconservadoras y contrarios al asociacionismo sindical. Los firmantes del telegrama, que han calificado de selectiva y antidemocrática la convocatoria de la constitución de la asociación, piensan convocar, por su parte, una asamblea para todos los realizadores, pues piensan que "todavía es posible la unidad".