Reaparece "Informaciones", editado por veinte trabajadores
El periódico Informaciones volvió a salir ayer a la calle, después de cinco meses de huelga realizada por los trabajadores por impago de sus salarios. El número de ayer, confeccionado y editado en los locales de El Alcázar por un reducido número de redactores y técnicos, que en ningún caso pasaría de veinte personas (la plantilla actual es de 310), fue quemado en público por un grupo de trabajadores de la plantilla de Prensa Castellana, quienes mostraban así la protesta por lo que consideran un «intento del editor Sebastián Auger para romper la huelga».
El decano de la prensa de la tarde de Madrid, que al menos durante seis días se confeccionará e imprimirá en los talleres de El Alcázar, ha aparecido con un nuevo formato de mayor tamaño y en sus veinticuatro páginas incluye diversas informaciones del día, un editorial titulado «Estos somos» y artículos de opinión de Antonio Guerra, Justo Díaz Villasante y del diputado de la MInoría Catalana, Ramón Trías Fargas. El director en funciones de este nuevo Informaciones es Juan Espejo, y en el equipo de redacción están colaborando, según ha denunciado el comité de empresa, personas que no pertenecían a la plantilla.En el artículo editorial que incluye el número de Informaciones aparecido ayer se justifica de alguna manera la reaparición del mismo por «profesionilidad y sentido común». «No servimos a otros señores», dicen los que lo editan, «porque para todos los que nos jugamos el buen nombre a diario hubiera sido mucho más fácil escondernos allí donde no se puede ser blanco de los piquetes. Y lo haremos bien o mal, pero lo que sí vamos a conseguir es ponernos en marcha y recuperar un puesto de trabajo con el que no contaba ni el más optimista».
El periódico habla de dos criterios: por una parte, «el de los que no quieren que la empresa sea esta empresa», y por otra, el de los que les da igual que sea la empresa que sea.
Tras denunciar las manipulaciones que la mayor parte del resto de los medios de comunicación han hecho del tema de Informaciones, quienes han trabajado para la reaparición de este periódico han anunciado que «dentro de unos días el editor contará lo que ocurrió en la historia del cierre de Informaciones».
El comité de empresa de Informaciones ha calificado, por su parte, la reaparición del periódico como una «extraña operación entre Auger y la ultraderecha, que deja al margen a la inmensa mayoría de la plantilla de Informaciones». Añade el comité que la dirección de Prensa Castellana ha ignorado olímpicamente la última resolución aprobada por el Ministerio de Trabajo, por la que suspendía temporalmente los contratos en Informaciones, por lo que piden a este organismo laboral que, en la mayor brevedad, regularice la situación y suspenda la publicación.
Según fuentes del comité de empresa, Sebastián Auger llamó por medio de telegramas a 83 trabajadores para iniciar una reestructuración de plantilla, pero la mayor parte de estos trabajadores no se dieron por aludidos, debido, entre otras razones, a que no se consideraban oficialmente llamados, ya que no les convocaba al trabajo la Dirección General de Empleo. «No nos oponemos a una reestructuración », han añadido representantes de los trabajadores, «sino a la falta de garantías que nos ofrece Sebastián Auger. ¡Cómo puede sacar un periódico cuando todavía nos debe cuatro meses de sueldo! »
El periódico de ayer fue realizado, según las mismas fuentes, por cinco personas de redacción y por varíos trabajadores de El Alcázar, a quienes les paga Prensa Castellana mil pesetas por cada hora extraordinaria.
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