Todos al extranjero

Han llegado las vacaciones, y todo el mundo se prepara para pasar los mejores días del año, en un ambiente de paz, tranquilidad y felicidad. Ya en la playa o en el monte (no sé por qué sólo podemos veranear en estos dos ambientes), los niños juegan; los mayores, también, y los abuelitos se aburren como conejos, aunque no lo digan. Claro que aburrirse, lo que se dice aburrirse, pienso que se aburre todo el mundo.Días de ensueño dicen. imagino que porque no se duerme lo suficiente, y pasa lo que pasa. Yo no es que esté en contra de un merecido descanso, cuando se esté cansado. sino que creo que lo de merecido y lo de descanso es una sencilla imbecilidad. Pero con lo que desde luego no estoy de acuerdo es con que nadie sienta, o pocos, que unas buenas vacaciones en estos momentos de crisis se pasan paseando por la Gran Vía madrileña, que está solitaria y triste como la uni versidad, o saliendo a la terraza a tomar el fresco o un botellín. ¿Cuándo aprenderemos los españoles que para veranear se nece sita tener los medios necesarios? ¿Por qué pasan unos días e n el extranjero, que ahora está de moda, quienes no pueden ni siquiera comer dignamente todos los días? En fin, el quiero y no puedo de siempre; es decir, una perfecta horterada. /