Crítica situación económica y financiera

El balance de Nervacero a 31 de diciembre de 1979 -presentado a la Administración a últimos de febrero del presente año- sitúa el pasivo de la empresa en 9.257 millones de pesetas, 2.568 de los cuales corresponden a capital propio; 969, a créditos a largo plazo, y 5.718, a pasivo circulante. En este capítulo, la cantidad atribuida a proveedores es de 2.645 millones de pesetas. Ensidesa, con cerca de setecientos millones, e Iberduero son los acreedores más importantes. Los más perjudicados por la situación de Nervacero, sin embargo, son el cúmulo de empresas de tipo pequeño medio y pequeños talleres, para los que la deuda supone prácticamente el fin de su actividad.El activo de Nervacero lo integran un inmovilizado material de 7.171 millones de pesetas, unas inversiones financieras permanentes de 223, un activo circulante de 746 y otros 1.117 por inventarios.

Los créditos bancarios a diversos plazos de Nervacero suman 2.060 millones de pesetas, 1.091 de los cuales vencen en el presente ejercicio. La distribución de los créditos es la siguiente: Banco de Crédito Industrial, 550 millones; Banco Central, 244; Banco de Bilbao, 140,5; Banca Mas Sardá, 215; Banco de Vizcaya, 101; Caja de Ahorros Municipal, 84, y proveedores de bienes de equipo, 726.

Los créditos bancarios a corto plazo por circulante y prefinancieros ascienden a 703 millones de pesetas, de los cuales 261 son del Banco Central y 150 del Banco de Bilbao. Los descubiertos en bancos suman 72 millones y las deudas contraídas con entidades públicas, 111.