Un economista discutido

Los franceses lo juzgan sobre todo perseverante y lleno de coraje personal y político y al mismo tiempo un poco suficiente e insensible. Este hombre de cara redondeadacomo un prelado del Renacimiento nació el 12 de abril de 1924 en Saint-Denis de la Reunión (La Reunión). Fue un brillante alumno del liceo Leconte de Lisle, de su pueblo natal, y más tarde siguió estudios universitarios en París, donde se licenció en Derecho y obtuvo el diploma del Instituto de Estudios Políticos.Empezó su carrera académica como profesor de econornía en Caen (Normandía). En 1961 fue nombrado profesor del Ins,tituto de Estudios Políticos de París y más tarde catedrático de Economía Política de la Universidad de París (1963). Escribió varios libros de texto que son inuy difundidos en Francia.

Al mismo tiempo, dirigió el equipo de investigaciones sobre la actividad económica en la Fundación Nacional de Ciencias Políticas.

Entre 1959 y 1962 ocupó el cargo, de director del grupo de asesores del ministro de Industria Jean Marcel Jeanneney. En 1966 fue consultor sobre precios e ingresos de la quinta comisión de planificación económica. Durante inucho tiempo sirvio como consejero económico del general De, Gaulle y después de Georges Pompidou.

En 1967 se le nombró vicepresidente de la Comisión de la ,Comunidades Europeas. Es el autor del proyecto de Unión Económica y Monetaria Europea. Igualmente, desempeñó el puesto de miembro del Consejo General del Banco de Francia.

El 25 de agosto de 1976, el presidente Giscard d'Estaing le designó primer ministro de Francia, en virtud de que es cel mejor economista de Francia», pese a que no pertenecía a ningún partido político. Sin embargo, él mismo no ocultó nunca que estaba manchado por el pecado original del gaullismo. Su política económica, mezcla de austeridad y de relanzamiento de la economía, ha. sido muy discutida en Francia. Mientras para unos es el primer ministro del paro, para otros es el salvador de la economía francesa. Sin embargo, pese a que su política ha sido muy combatida, el presidente Giscard d'Estaing le nombró nuevamente primer ministro el 31 de marzo de 1978. Los franceses le reconocen una gran virtud: la de hablar con claridad a todos y con absoluta franqueza sobre las propias limitaciones nacionales.