Se suicida un preso común en la cárcel de Carabanchel

El preso común Ramón Sánchez Martínez, de 34 años, falleció el pasado sábado en la prisión provincial de Carabanchel al precipitarse al vacío desde el tercer piso de la tercera galería de la prisión. La noticia fue confirmada ayer a EL PAIS por el director del centro penitenciario, Eusebio Hernández.Según el señor Hernández, no cabe duda de que se trata de un suicidio, aun cuando el caso está en manos de la autoridad judicial competente. Dicha aseveración la basa en los testimonios de algunos reclusos que presenciaron el suceso. Incluso uno de los compañeros de Ramón Sánchez, cuyo nombre, no fue facilitado por el director del centro, trató de persuadir en vano a aquél durante varios minutos. El caso se produjo a las 10.30 de la mañana del sábado.

Según Eusebio Hernández, el finado padecía situaciones depresivas debido al estado de alcoholismo que padecía, las cuales pudieron ser motivo de su última decisión.

La muerte del recluso sorprendió a las autoridades y compañeros de aquél, por cuanto hacía solamente cinco días que había ingresado en la prisión, a la espera del juicio por una causa instruida en 1978, «que debía ser de pequeña consideración, por las noticias que me han llegado», afirmó Hernández, «y máxime cuando era una persona que había estado internada con anterioridad en centros penitenciarios en nueve ocasiones».

La última vez que había sido recluido en Carabanchel fue el 22 de marzo último, para ser puesto en libertad seis días más tarde. En enero había sido ingresado durante catorce días y su condena más larga la había cumplido entre 1974 y 1976 por homicidio frustrado en la persona de un niño. También había cumplido un año de privación de libertad por robo. «Nadie se explica la muerte del recluso, aunque desgraciadamente son cosas que suceden en las prisiones», agregó Eusebio Hernández.