_
_
_
_

Keegan jugará la primera temporada en el modesto Southampton

Kevin Keegan, el mejor jugador de Europa, sorprendió hace pocos meses a toda la afición europea al anunciar que habla decidido aceptar la oferta del Southampton, uno de los modestos de la Primera División inglesa. Una ciudad de un cuarto de millón de habitantes y un campo con capacidad para sólo 24.000 espectadores, y con un césped en el que anidan los topos, han sido la elección de este fabuloso jugador, por el que suspiraban los mejores clubes del continente. Lawrie McMenemy, mánager del Southampton, supo conseguir el milagro.

Lawrie McMenemy es un grandullón de 1,90 metros, decidido a hacer del Southampton uno de los grandes del fútbol europeo; ya hace cuatro temporadas dio un aviso, al conseguir para su equipo la Copa de Inglaterra, pese a que entonces militaba en Segunda División. Poco a poco, ha conseguido hacer un aceptable equipo, que marcha en la zona media de la tabla (en esta temporada hubo momentos en que incluso codició un puesto en la Copa de la UEFA), pero su gran éxito ha sido contratar a Kevin Keegan para el año próximo. La Juventus, el Barcelona, el Saint Etienne.. entidades con un fortísimo poder económico, han visto cómo Keegan escogía el Southampton con sorpresa.Recientemente, McMenemy confesaba a un redactor de L'Equipe su secreto: «Mientras todos le hablaban de dinero, yo le he hablado directamente al corazón». Hace algunos meses, McMenemy se encontró en la necesidad de comprar unas piezas de madera para la fachada de su casita de campo; el constructor le dijo que eran muy caras, porque había que comprarlas en Hamburgo, y él decidió ahorrarse algún dinero encargándoselas a Keegan, al que llamó por teléfono. En el curso de la conversación se dio cuenta de que estaba cansado del Hamburgo, de que deseaba cambiar de club.

Le siguió telefoneando periódicamente, a fin de saber cómo iban sus conversaciones con otros clubes. De paso, aprovechaba siempre que había lugar para dejar caer una frase desanimadora: «¿Sabes que en Italia todas las grandes figuras necesitan un guardaespaldas para caminar por la calle?», o ¿El Barcelona? No les suele ir muy bien a las estrellas en ese club», o. «Desde mi punto de. vista, mejor que en el Saint Etienne estarás en tu casa, en Inglaterra».

Ayudar al fútbol inglés

De ahí pasó al ataque directo. Para conseguir el fichaje tuvo que echar mano de todas sus dotes de persuasión. Southampton es una ciudad portuaria, de no más de un cuarto de millón de habitantes, y con un campo, el Dell, con sólo capacidad para 24.000 espectadores, unas instalaciones muy modestas y un grave problema: los topos se han encaprichado de su césped, que, a pesar del esfuerzo de los jardineros, está impresentable. Pero McMenemy supo motivar el deseo de Keegan con un desafío: «Hace años que trato de hacer del Southampton un club fuerte, y tú puedes ayudarme. Juntos lo pondremos entre los mejores de Europa». A Keegan le agradó la idea. Su mujer se sentirá feliz de vivir en una casita de campo que McMenemy les ha buscado, muy cerca de Southampton, en uno de los muchos bonitos rincones del sur de Inglaterra, y de dar a su hija, que aún no ha cumplido los dos años, una educación inglesa. Y a Keegan le apetece estar en Inglaterra los dos años que median de aquí al Mundial. Pese a ser el mejor jugador de Europa, aún no ha podido jugar ningún Mundial, pues Inglaterra no consiguió clasificarse para los dos últimos, y Keegan quiere estar en el de España.La pregunta es de dónde saldrá el dinero para mantener un lujo así en un club tan modesto. McMenemy rechaza los rumores, según los cuales la British Petroleum, que hasta ahora respalda económicamente al Hamburgo, a cambio de que sus jugadores luzcan sobre el pecho las iniciales BP, esté interesada en la operación a cambio de que el Ayuntamiento de Southampton le conceda facilidades para instalar un importante complejo petrolero en el puerto. El Southampton es uno de los pocos clubes de la Liga inglesa de economía saneada, aunque modesta, y McMenemy asegura que en la caja del Southampton hay la cantidad suficiente (setenta millones de pesetas) para pagar el fichaje. Respecto a los ingresos de Keegan, asegura que tampoco hay problema: los abonos subirán de un 30 a un 40%, aumento que los supporters satisfarán sin protestas.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_