Las Palmas derrotó al Atlético en diez minutos

Las Palmas ganó al Atlético en un bonito encuentro resuelto en los primeros minutos de la segunda parte, en los que algunos fallos defensivos se unieron a una gran fase de juego de los canarios. Salvo en esos minutos, el Atlético dio una buena imagen, en especial en la primera parte, bien conducido por Dirceu.Comenzó bien el Atlético, con un Dirceu que gustó mucho; su equipo le buscaba siempre para armar su juego de ataque, y el brasileño, luchador, rápido para desmarcarse y magnífico con el balón en los pies, tanto en sus regates como en sus pases, ponía en apuros a Las Palmas. En el minuto veinte, el Atlético ya había disparado con peligro algunas veces, y la movilidad de Marcos y Rubio y la atención al gol de Rubén Cano hacian temer a los aficionados canarios lo peor. En el minuto veintiuno, el Atlético recogía el premio de este juego gracias a un penalti y marcaba. La ventaja para Las Palmas fue no dejar que la diferencia en el marcador durase mucho, pues empató pronto a la salida de un córner. Desde entonces hasta el descanso, juego alterno, con ocasiones en ambas puertas y gran actuación del meta canario, Pérez, que se anotó grandes paradas.

La segunda parte dejó pronto el partido resuelto. Al minuto, un fallo de Dirceu, propició la ventaja de Las Palmas, que se lanzó como un huracán, mientras el Atlético quedaba atontado, y en ocho minutos más Las Palmas aseguraba la victoria con otros dos tantos. Aún duró más tiempo la fase de gran juego de Las Palmas y de despiste atlético, y la goleada estuvo cerca de incrementarse. Cuando, poco a poco, Dirceu -a quien su fallo en el segundo gol canario pareció dejarle atontado- se serenó y volvió a hacerse con el control del partido, el Atlético restableció la situación e intentó acortar distancias. Lo consiguió, pero en ningún momento pudo acercarse al empate por culpa de esa ventaja de tres goles que había cedido en diez minutos. El partido finalizó con juego brioso por los dos equipos y con el público entusiasmado, tanto por la goleada de su equipo como por el juego alegre y ofensivo que se presenció.

El Atlético, pese a la derrota, no ha dejado mala imagen, y sólo esos pésimos minutos -a los que se sumó su meta, Navarro, que no estuvo afortunado en los goles- le hicieron salir ampliamente derrotado del Insular. Las Palmas aprovechó las facilidades que le ofreció el Atlético en esa racha y, por lo demás, hizo un juego aceptable en el resto del partido. Su rendimiento va mejorando, y en las islas se vuelve a pensar en el sueño de la Copa de la UEFA, dado que el equipo cuenta con un positivo y parece decidido a reaccionar. El extremo Julio -hermano de Pepe Juan- se asienta cada vez más en el equipo, y los cinco goles que lleva marcados desde que entró en el mismo permite esperar grandes cosas de él. Por el Atlético también gustaron los jóvenes Marcos y Rubio, aún semidesconocidos en Canarias; impresionó Dirceu a pesar de ese balón perdido que le hizo desconectarse del juego bastantes minutos.