Carreras de caballos "Number One", un ejemplar con futuro

Number One y Tolo Gelabert fueron los protagonistas indiscutibles de la segunda reunión de la temporada de primavera, que se disputó el domingo en el hipódromo de La Zarzuela. Number One venció en el Premio Stanleyville, carrera de segunda categoría, en el que se enfrentó con otro, de los mejores caballos de la generación de los dos años, Sueño. Tolo Gelabert condujo a dos de los ejemplares ganadores de la jornada, Tiburón y Great Jet que vencieron en los Premios Fernán Núñez y Casa de Campo.

El Premio Fernán Núñez era el mejor dotado de la tarde y, en teoría, el que más atención debía despertar, pero una vez realizado el programa, todo el interés de la reunión se centró en la segunda carrera del programa -en el Premio Stanleyville-, en el que reaparecía Number One, un caballo que causó una excelente impresión cuando tenía dos afíos y que su cuadra considera como un futuro crack. El caballo de la cuadra Rosales tenía como mayor enemigo a Sueño, que perteneció a los colores de Dos Estrellas y que ahora corre a nombre de la cuadra Mendoza. Number One dominó la prueba desde el principio. Su recorrido fue un simple entrenamiento. Claudio Carudel, al final, bajó las manos y ni tan siquiera tuvo necesidad deempujarle, ya que la superioridad de su caballo no lo hacía necesario. Román Martín, en cambio, dio varios palos a Sueño, otro buen ejemplar, pero no de la categoría del de Rosales.Number One es hijo de uno de los últimos grandes caballos del hipódromo, Chacal, y, como él, tiene una gran clase que le hace ser, al principio de la temporada, uno de los grandes favoritos para las pruebas clásicas. Number One parece que correrá en el Cimera.

Tolo Gelabert, hijo y nieto de dos grandes jinetes, a sus dieciséis años, ha ganado ya veinticinco carreras. El domingo venció en la más importante del programa, en el Fernán Núñez, en el que se impuso, contra pronóstico, Tiburón, un caballo que sobre el papel debió ser batido. Coloso era el gran favorito de esta carrera, pero, de nuevo, el caballo de la cuadra Rosales no gustó. Coloso marchó, como siempre, rezagado en el pelotón y no quiso emplearse en el momento necesario. El barro influyó en el resultado del Fernán Núñez, como en el resto de las pruebas.

Tolo Gelabert antes había ganado con Great Jet en un hándicap en el que tomaron parte trece caballos. En la primera carrera, el joven jinete Gelabert fue segundo, con Poncio, y en la tercera, con Artillero, se volvió a clasificar en la misma posición.