Con óptica patronal

La lucha por la defensa de los derechos de los jugadores de fútbol comenzó mucho antes de que existiera la AFE y, por supuesto, con anterioridad a que José Luis Carceller se erigiera en defensor de la asociación de futbolistas. Los letrados Cabrera Bazán, López Royo y Ajuria fueron quienes iniciaron las acciones judiciales.Carceller subió al tren en marcha y se anotó tantos importantes. Su labor fue tenaz y meritoria. En el momento oportuno también se pasó a la patronal y fichó por el Atlético de Madrid. El tema del derecho a la imagen de los jugadores fue uno de sus caballos de batalla. Al cabo de pocos meses, Carceller, desde la patronal, ha vuelto la oración por pasiva.

Algunos jugadores del Atlético tienen contratos privados con marcas de material deportivo, lo que les reporta ciertos beneficios. Carceller, en nombre del club, ha establecido un contrato con determinada marca comercial para que los jugadores atléticos luzcan siempre la misma ropa, o lo que es lo mismo, la que le interesa al club.

Carceller debería saber que los contratos de los jugadores deben respetarse, pero, al parecer, no está dispuesto a que así sea. Los contratos de los futbolistas tienen lagunas importantesy una de ellas es precisamente la de su propia imagen y la de los contratos publicitarios. Carceller, si estuviera en la AFE, pediría sin duda que la norma comenzara a aplicarse sobre los contratos nuevos o los que hayan de ser renovados. Desde el club tiene una óptica diferente.