Procesados dos empleados del Metro a causa de un accidente de 1978

Jesús Díaz Rodríguez, jefe de la estación de Metro de Tirso de Molina, y José Luis Garzón, conductor del tren que el día 8 de mayo de 1978 colisionó con otro que estaba detenido, con un resultado de 128 personas heridas de diversa consideración, han sido procesados por el Juzgado de Instrucción número trece de Madrid, por el presunto delito de imprudencia temeraria.El titular del Juzgado considera, según informa la agencia Efe, que pudo existir imprudencia en el jefe de estación y el conductor del convoy número veintiuno, que resultó con fractura de ambas piernas, al quedar incrustada la cabina de mandos del tren que conducía en la parte trasera del último vagón del convoy número veinte.

Además de los daños sufridos por los 128 heridos, diez de ellos de gravedad, el juez instructor estima que las pérdidas materiales ocasionadas por el accidente se elevan a 13.457.500 pesetas.

Según los datos que pudo recoger este periódico en su momento (véase EL PAIS de 9-5-1978), el accidente tuvo lugar entre las estaciones de Tirso de Molina y Sol, cuando, hacia las 5.25 de la tarde del citado lunes día 8, un tren que había salido de la primera estación se encontraba parado a la entrada de la de Sol. Despuéz de diez minutos de espera para poder entrar en esta última estación, los viajeros del coche de cola vieron acercarse lentamente otro convoy que venía en el mismo sentido y que instantes después colisionó con el que estaba parado, el número veinte, que esperaba en el lugar por encontrarse el semáforo en rojo.

El número veintiuno, después de haber esperado unos momentos en la estación de Tirso de Molina, reemprendió la marcha y en su trayecto hacia Sol se encontró con el tren anterior. Parece ser que no disponía del boletín de doble precaución para circular. Sin embargo, salió de la estación cuando el anterior esperaba autorización para arribar a la siguiente. Esta parece ser la razón del procesamiento del conductor, José Luis Garzón.

La causa por la que el jefe de la estación de Tirso de Molina es procesado puede ser porque los responsables de cada estación han de supervisar las señales de la parada a su cargo y de la anterior y posterior, por lo que puede tener responsabilidad en la salida del convoy número veintiuno, que originó el accidente.