David Rimon
es un israelí de 65 años que, con un infarto grave y sólo tres meses de vida como expectativa, empezó a correr, participó en olimpiadas, recuperó la salud y acaba de publicar un libro «para un largo 1980», autobiografía titulada De cardíaco a corredor olímpico. Hace diez años, Rimon tuvo el infarto. y los médicos le prescribiron reposo absoluto. Abuelo de cuatro nietos y director de una escuela de comercio, ejemplifica su desconfianza hacia los facultativos mediante una historia sobre tres enfermos a los que sólo les queda una hora de vida. «¿Cuál es su último deseo?», les pregunta el galeno. Un inglés pide una botella de whisky, su pipa y el periódico; un francés solicita una mujer y champaña. El tercero, un israelí afirma: «Quiero ver a otro médico.»
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.