Doscientos vecinos de Carabanchel ocupan un bloque de viviendas

Más de doscientas personas, pertenecientes a la Asociación de Amas de Casa y a la Coordinadora de Chabolistas de Carabanchel, ocuparon ayer un bloque de viviendas de la calle del General Fanjul, para exigir una entrevista con el director del Instituto Nacional de la Vivienda, señor Carreño.

Hacia las diez de la mañana, miembros de ambas asociaciones entraron en el edificio de 112 viviendas de la calle del General Fanjul, número 27, y fueron ocupando las viviendas, a la vez que se ponían en contacto con el delegado provincial del INV, José Luis Mas. Le exigían la celebración de una entrevista que estaba concertada para el pasado lunes, pero que no se había llevado a cabo.El pasado día 6, tras una pequeña manifestación de amas de casa de Carabanchel ante el Ayuntamiento, miembros de esta asociación conversaron con el alcalde, Enrique Tierno, y le solicitaron que las viviendas que construye Visomsa en el distrito fuesen compradas por el INV y 55, de las 112, adjudicadas a las familias más necesitadas de la asociación en régimen de alquiler. Enrique Tierno se mostró de acuerdo con la propuesta y se estableció la fecha del pasado lunes para celebrar una reunión, a la que asistirían el director del INV, el delegado provincial del mismo, el gerente de Urbanismo del Ayuntamiento, el concejal del distrito y los representantes de las dos asociaciones.

Sin embargo, la entrevista, por diversos motivos, no se celebró. El pasado jueves, el director del INV, Carreño, regresó de un viaje por Africa, y hoy lo hace Tierno de su visita a Moscú. Pero los vecinos no esperaron hasta su llegada, porque ayer se celebró Consejo de Ministros y querían presionar para que en él se decidiese la adjudicación de un dinero para la compra de las viviendas.

A mediodía de ayer, el concejal del distrito, Miguel Lara, se presentó en el bloque ocupado y manifestó que tanto el director como el delegado provincial del INV estaban de acuerdo en que el organismo estatal comprase las viviendas. Por esta razón, se concertó que la entrevista se celebre en la mañana de hoy, aunque la hora no ha quedado fijada.

Según los dirigentes de las asociaciones ocupantes, sus miembros no abandonarán los pisos hasta que no reciban por escrito la decisión del INV de comprar las viviendas.

Manifiestan que llevan dos años luchando por viviendas dignas, y de 127 que solicitaron en principio, solamente les han sido adjudicadas treinta. Reciben siempre buenas palabras, pero todo se queda en nada, por lo que exigen que se les den todas las promesas por escrito. Por otra parte, saben que el Ayuntamiento ha solicitado de las juntas de distrito que aporten las instancias de petición de viviendas, y consideran que ellos tienen la promesa hecha hace tiempo y no se las pueden quitar.

Invasión de un bloque cercano

Por otra parte, en el número 81 de la misma calle existen una serie de viviendas que ya han sido adjudicadas, pero que no pueden ser ocupadas por las familias porque no está aprobada la compra por el Consejo de Ministros. Se había anunciado que el Consejo daría su visto bueno en la reunión del pasado día 30 de noviembre, pero la decisión fue pospuesta y se espera que sea aprobada el próximo viernes.Mientras se demora la aprobación y los adjudicatarios no pueden ocupar las viviendas, éstas han sido invadidas por una serie de personas que han destrozado diversas zonas de la escalera, gran parte de las puertas de acceso a los apartamentos, numerosos cristales y la mayoría de las habitaciones están llenas de orín y excrementos.

Ante estos hechos, los ocupantes del número 27 celebraron una asamblea a última hora de la tarde y decidieron no abandonar definitivamente las viviendas. A primeras horas de la noche estaban transportando muebles y diversos enseres para quedarse ya a dormir. De este modo no corren el riesgo de que sean invadidos como en el bloque cercano.

Los ocupantes, antes de esta decisión, estudiaron los pros y los contras y finalmente celebraron un sorteo para adjudicar los pisos que debían ocupar las distintas familias. Para el sorteo se tuvo en cuenta el número de miembros de cada familia, la edad de sus componentes y los ingresos de cada uno. «Queremos hacerlo bien», manifestó la presidenta de la Asociación de Amas de Casa.

Con esta premisa, hoy asistirán a la reunión con el director del Instituto Nacional de la Vivienda. Llevan, según la presidenta, copia de todas las instancias que en su día fueron entregadas para solicitar viviendas y en las que se detallan los ingresos, los hijos, etcétera, con el fin de que les sean adjudicadas las viviendas con respecto a las necesidades de cada uno. De esta forma, los organismos oficiales podrán estudiar e investigar las declaraciones hechas por cada solicitante y actuar en consecuencia. En el caso de que en alguna de estas instancias se diesen datos falsos que indicasen que los peticionarios no son merecedores de la vivienda, la asociación apoyará que dichos falseadores sean desalojados y sustituidos por los siguientes en las listas.