Posible acuerdo en la negociación del convenio-marco

La firmeza patronal en el mantenimiento de la banda salarial propuesta en la última reunión negociadora -no superior al 15%- del convenio-marco interconfederal, parece haber acabado con la transitoria unidad mostrada por CCOO y UGT en la reivindicación de una banda del 14 al 17%, promovida inicialmente por la primera de las centrales, lo que hace resurgir las esperanzas de acuerdo.

No obstante, los vaivenes que registra la negociación, por otra parte ya muy dilatada y a punto de frustrar las expectativas que finalmente logró crear en la opinión pública, parecen más propios de la discusión de un convenio colectivo de sector o empresa, en la que ambas partes se engañan con sus ofertas y sus reivindicaciones, que de la negociación responsable de un convenio-marco, que las tres organizaciones se habían comprometido a llevar adelante.En calidad, fue ayer, sobrepasadas las tres semanas de reuniones, cuando se entró verdaderamente en materia y se fijaron de una manera más o menos definitiva los porcentajes de aumento salarial, verdadero centro de la negociación, toda vez que los demás aspectos del posible acuerdo están ya prácticamente ultimados, incluido el de la jornada. Sobre este último, el compromiso que parece haber prosperado es el de alcanzar en los dos próximos años y tres convenios un cómputo anual de horas equivalente a las cuarenta semanales.

En el tema económico, sin embargo, se encuentra la única dificultad que impide lograr el acuerdo. Tras la reunión de ayer, y con la firme defensa de la patronal de su banda salarial, UGT retrocedió en sus planteamientos -después de que hubiera apoyado la pretensión de CCOO en reuniones anteriores- y ofreció firmar el acuerdo si se establecía una banda salarial entre el 13 y el 16

En estos términos, el próximo lunes puede tener lugar la reunión definitiva -no obstante, las tres organizaciones hablaron, con anterioridad, de situaciones límites sin que luego fueran tal-, ya que, según ha podido saber EL PAIS, la patronal no tendría que esforzarse mucho para aceptar la propuesta de UGT, siempre que CCOO accediera a la misma.