Violencia en el fútbol norteamericano.

La imagen más bien semeja un campo de batalla que uno de fútbol. Diecinueve personas, tres de ellas de extrema gravedad, fue el resultado de una violenta pelea entre los aficionados rivales que asistieron a un encuentro de fútbol. Esto ocurrió en Camden, estado de Nueva Jersey, en Estados Unidos. La policía tuvo que intervenir y cacheó a varios elementos considerados como peligrosos, una vez que dominó la situación. Anecdóticamente, el encuentro no era de competición, sino que fue organizado como un espectáculo más de Camden en el Día de Acción de Gracias. El joven fútbol americano pronto ha heredado la brutalidad, aun sin estar en disputa los puntos. Y es que la barbarie de una alocada afición no tiene límites, ni aquí, ni en Europa, ni en América.