El acuerdo del Hipotecario y Valora cancela la subasta del hotel Sarriá

La subasta del hotel Sarriá, de Barcelona, prevista para hoy, no se llegó a celebrar por el acuerdo que suscribieron las dos partes implicadas el pasado lunes, según informa una nota oficial del Banco Hipotecario. Esta entidad concedió a la empresa Valora, propietaria del hotel, dos créditos en 1974 dentro de la línea del crédito hipotecario al sector turístico por valor de 24 y 142 millones de pesetas, respectivamente. Los préstamos, al igual que los habituales en esa línea y en esa época, se suscribibierón al 7,25%, con quince años de amortización y tres de carencia.En el momento del primer y posteriores vencimientos, la empresa Valora no abonó al Banco Hipotecario los intereses y principal que le correspondían amortizar. Esta situación se repitió a lo largo de seis semestres. Ante esta actitud, el Banco Hipotecario procedió a los requerimientos habituales para la ejecución de los créditos.

El procedimiento de requerimiento culmina con la convocatoria de subasta del bien afectado por el crédito, en este caso el hotel Sarriá, que, a su vez, ha ido pasando por la serie de vicisitudes que comentamos en nuestra edición de ayer. Resumidamente, éstas son el arrendamiento del hotel a la empresa pública (INI) Entursa, que, a su vez, había facilitado importantes créditos a Valora y la decisión del Tribunal Supremo de desautorizar la construcción de varias alturas del edificio del hotel que suponen el 40% de su volumen edificado. El tema se sazona políticamente por el hecho de que las relaciones Entursa-Valora se produjeron en momentos en que sus responsables eran, respectivamente, Adolfo Suárez y Antonio van der Valle, buenos amigos en esa época.

El acuerdo al que han llegado las dos partes implicadas ha supuesto el abono de las cantidades pendientes de pago por parte de Valora al Banco Hipotecario, parte en metálico (la mitad) y el resto con pago antes de noventa días.

Según la nota oficial del Banco Hipotecario, la decisión de reclamar el pago de la deuda «se inscribe dentro de la normal actuación bancaria en esos casos, máxime teniendo en cuenta que la responsabilidad del Hipotecario es aún mayor si cabe, por tratarse de un organismo del Estado al servicio de la sociedad».