El Madrid-Barcelona, pleno de alicientes

El encuentro que esta tarde disputarán, a partir de las siete y media, el Real Madrid y el Barcelona, en el pabellón madridista, ha despertado una expectación inusitada. Récord de recaudación, ya que, al margen del «no hay billetes», jamás costó sentarse en el pabellón setecientas pesetas, numerado, y quinientas, sin numerar. Ni siquiera en la final europea que se jugó frente al Simmenthal. Una vez más, Televisión Española ha querido ignorar las preferencias de la mayoria y no ofrecerá el partido en directo.

Real Madrid y Barcelona van a protagonizar esta tarde el partido más interesante que desde siempre ofreció la Liga. Son los unos equipos invictos y marchan bastante igualados en todo: 451 puntos a favor y 351 en contra consiguió el conjunto blanco en los cuatro partidos que se han disputado, por 429 y 367 del equipo azulgrana, que ya tuvo la difícil salida de Manresa y recibió en su cancha al Joventut. Por si fuera poco -y esto es fundamental para el interés que pueda ofrecer el encuentro-, no influye para nada el basket average, ya que, según se acordó en la última asamblea, en caso de terminar dos equipos igualados a puntos, el título se decidirá en un partido entre ellos, en cancha neutral. Esto hará que los dos jueguen a tumba abierta.Las recientes polémicas y los enfrentamientos entre los dos presidentes hacen aumentar la tensión del choque en todos los aspectos. También hay que tener en cuenta que los blancos pusieron el partido en domingo -su hora oficial- con la esperanza de que el partido fuera televisado. No será así, por las discrepancias que Televisión tiene con el Barcelona, y de esta manera los telespectadores de todo el país pagarán los «infantilismos» de los dirigentes de la entidad catalana.

Ya «puestos en la cancha», hay que decir que posiblemente nunca hubo tanta igualdad, sin que esto quiera decir que el Madrid según señala la tradición, no vuelva a ganar, incluso por mucha diferencia. Pero también puede perder. Y esto es lo que hace que el encuentro cobre ese tremendo interés. El entrenador del Barcelona, Antonio Serra, tiene dos opciones: una es la de jugar con las mismas armas que su rival, en cuyo caso saldría Solozábal en el cinco inicial para verse las caras con Corbalán, al que difícilmente podrá frenar; otra es la de empezar con Ansa Fernández, Epi, Sibilio y Guyette, lo que complicaría mucho las cosas al Madrid a la hora de defender, pero que significaría menos rapidez en el contraataque azulgrana, una vez que Sibilio y Guyette se apoderen de los rebotes defensivos. De ser así, Sainz se vería obligado a desdoblar a López Iturriaga, hombre clave en este partido, tanto en defensa como en ataque, pese a que será Juan Antonio Corbalán el que tenga la llave del triunfo para su equipo, ya que ni Solozábal podrá pararle ni Ansa o Fernández podrían ser sus defensores, por ser más lentos que el base madridista.

Por último, decir que el hecho de que la responsabilidad de dirigir este partido haya caído en el colegiado Pedro Hernández Cabrera hace pensar que el Colegio de Arbitros, con buen criterio, se «salte» un poco las normas y en vez de sorteo haga acoplamientos. El canario, teóricamente, aparece como más neutral que cualquier castellano o catalán.