Cuatro millones, botín de un atraco a una sucursal bancaria

A las once menos cuarto de la mañana de ayer, cuatro individuos, armados con pistolas y una escopeta de cañones recortados, atracaron la sucursal del Banco Central, situada en el número 32 de la calle de Sancho Dávila. Los atracadores se apoderaron de más de cuatro millones de pesetas.Los cuatro individuos conminaron con sus armas a los empleados de la entidad y a los clientes que en aquellos momentos se encontraban en el interior a que no les mirasen a la cara. Uno de los atracadores llevaba el rostro cubierto

Una vez llenada la saca que portaban con el dinero que había en la caja, que al parecer estaba abierta, encerraron a los empleados y clientes en un cuarto contiguo y a continuación huyeron sin que se sepa el procedimiento empleado.

Detenido un súbdito británico

El pasado martes, hacia las diez de la noche, fue detenido en el hotel Meliá Castilla, de la calle del Capitán Haya, el súbdito británico M. J. B., natural de Londres, de 38 años de edad y residente en Madrid, acusado de los delitos de agresión, resistencia, escándalo público y daños.

El ciudadano inglés comenzó, súbitamente al parecer, a destrozar los elementos decorativos del vestíbulo de dicho hotel, rompió, provisto de una silla, la vajilla que se encontraba en el mostrador de la cafetería, arrancó uno de los teléfonos y fracturó un ánfora del siglo XV de alto valor artístico, además de intentar agredir al vigilante de seguridad. Avisada la policía, el agresor se abalanzó sobre los inspectores que acudieron al local e intentó golpearles. Una vez en la comisaría de Tetuán, donde fue trasladado, rompió el cristal de un montante de un puñetazo.

Posteriormente hubo de ser atendido en un centro asistencial de heridas cortantes en la mano derecha y agitación psicomotriz. Más tarde pasó al hospital Alonso Vega donde quedó internado.