Inminentes e importantes elevaciones de los precios energéticos

Los trece países miembros de la OPEP han llegado a un acuerdo según el cual a primeros de julio el barril de petróleo costará veinte dólares, precio al que pueden agregarse algunas primas por calidad y otros conceptos.

La decisión más importante de la reunión ordinaria de la OPEP celebrada en Ginebra no es tanto la elevación a veinte dólares cuanto la decisión de unificar los precios eliminando las sobretasas que se han aplicado a lo largo de los últimos meses . Los veinte dólares por barril, que son un golpe duro para todas las economías dependientes del petróleo, suponen consolidar e incluso rebajar en algunos casos los precios actuales de alguno países exportadores.La Conferencia de Ginebra celebró ayer sesiones de mañana y tarde en el hotel Intercontinental en el que se habían tomado excepcionales medidas de seguridad. Tras la sesión de la mañana se delinearon las tradicionales posiciones de duros y moderados dentro de la Organización. El representante saudita manifestó que su país se oponía a cualquier decisión que no fuera un precio unificado inferior a dieciocho dólares por barril. Los buenos oficios de Al Oteiba, presidente de la Organización y ministro de los Emiratos, permitieron flexibilizar la posición de los sauditas. que por la tarde aceptaron una elevación hasta la banda de diecinueve a veintiún dólares por barril. Un grupo de expertos quedó comisionado a última hora de la tarde para fijar el precio base unificado que se aplicará a partir del primero de abril al tipo de crudo nominado arabian ligero. Según todos los observadores, el nuevo precio se fijará en veinte dólares.

El impacto de la subida es difícil de medir con respecto a la situación actual. ya que los precios están absolutamente desordenados. Para España, el coste de las importaciones efectuadas en el presente año se sitúa en estos momentos por encima de los 17,5 dólares por barril con tendencia a aumentar. Si el nuevo precio oficial se establece en veinte dólares, las autoridades españolas tendrán que plantear un reajuste de los productos energéticos de cierta importancia.

Según expertos españoles, el coste del petróleo importado en el presente año se elevará de los 4.7 10 millones de dólares previstos a principios de año a más de 6.000. La elevación no se compensa más que en una mínima parte con la apreciación de la peseta por lo que hay que esperar inmediatas elevaciones de los precios de todos los productos energéticos y de sus derivados.

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