Sólo Arnoux se entrenó en el Jarama

Los primeros entrenamientos privados del circuito del Jarama de los monoplazas de fórmula 1 que llevan ruedas Michelin han pasado prácticamente inadvertidos. La sola presencia del francés René Arnoux, segundo piloto de Renault, era casi la única nota destacada en una sesión que no ha aportado nada.

En principio, se esperaba la actuación de los dos hombres de Ferrari, el canadiense Villeneuve -actual líder de la clasificación provisional del Campeonato del Mundo- y el surafricano Scheckter, junto con la de los dos de Renault, Jabouille y Arnoux. Junto a éstos, Michelin había permitido la presencia en la pista de Emerson Fittipaldi, con su Copersucar; la de los hombres de McLaren y la del mexicano Rebaque, aunque todos ellos lleven en sus vehículos ruedas Good-Year, competencia de la casa francesa. Sin embargo, ninguno de ellos se presentó a la cita, a la que sólo acudió Arnoux por parte de Renault.Se esperaba también que Renault trajese su nuevo vehículo, el RS- 10, coche que sigue las últimas tendencias del Wing-car o coche de efecto de ala invertida. Además del nuevo chasis, la marca francesa va a experimentar un nuevo sistema de alimentación para su motor, basado en un doble turbocompresor en lugar del simple que lleva actualmente. Pero, junto con la ausencia de Jabouille y la del director deportivo del equipo, el ex corredor Gerard Larrousse, también estuvo ausente este nuevo monoplaza, en el que, según todos los indicios, la Regie ha puesto las máximas esperanzas.

Así, con sólo el pequeño Arnoux en la pista del circuito del Jarama y con el coche ya veterano, que ha dado de sí todo lo que cabía esperar de él, los tiempos logrados por el equipo galo son escasamente representativos. En ningún momento llegó a acercarse a los registros logrados hace unas semanas por su compatriota Laffite, con el Ligier, aunque nadie esperaba que lo hiciera. Ni por el coche, ni por los neumáticos ensayados, ni siquiera por la calidad del piloto, segundo hombre en el seno del equipo Renault y del que incluso se ha llegado a comentar que la próxima temporada no seguirá formando parte de la escudería, ya que será relevado por su corripatriota Pironi, actualmente en Tyrrell, retenido por su contrato con el manager británico.

Para hoy, se espera que acudan, por lo menos, el resto del equipo Renault, con el nuevo monoplaza, así como la escudería Ferrari al completo, con sus dos hombres. Esto puede dar cierto aliciente a estos entrenamientos de carácter privado. Máxime, teniendo en cuenta que el objetivo del canadiense Villeneuve será intentar, por todos los medios a su alcance, rebajar el tiempo logrado por Laffite, que -recordémoslo- era de 1.14.9. Si el canadiense, o su compañero de equipo Scheckter -al que anima un tremendo afán de revancha, de poner las cosas de nuevo en su sitio, pues él partía en esta temporada como piloto número uno del equipo- se acercan al sensacional tiempo marcado por el piloto de Ligier -que mejora en 1,5 segundos el récord oficioso del circuito-, y más aún si logran mejorarlo, la emoción de cara a la carrera que se celebrará el próximo domingo día 29 de este mes subirá muchísimos enteros. De no ser así, las posibilidades de una victoria para Laffite se habrán incrementado notablemente, y, con ellas, sus aspiraciones a la obtención del título de campeón del mundo.

Sea como sea, no hay que olvidar que antes de la carrera, cuando comienzan los entrenamientos oficiales, los que ya son válidos para establecer las posiciones de la parrilla de salida, los pilotos rinden mucho más que en estas jornadas, que son, fundamentalmente, de trabajo de puesta a punto.