Récord de expectación ante el Madrid-Emerson
Hacía tiempo que el Pabellón del Madrid no se veía obligado a vestir sus mayores galas para recibir un choque como el de esta tarde. El Madrid-Emerson ya ha batido el récord de expectación y de taquilla y se puede asegurar que a partir de las ocho menos cuarto batirá el el emoción. Los dos grandes europeos de los últimos años se juegan el estar o no en la gran final de la Copa de Europa. El triunfo del Bosna en Atenas por 83-88 le dio ayer ya la otra plaza de finalista.El calendario de esta liguilla de la fase final cluiso enfrentar en la última jornada a Real Madrid y Emerson, y después los resultados de unos y otros se encargaron el poner voltios al choque para que éste alcanzara la máxima tensión. El club blanco subió discretamente el precio de las entradas -numeradas, a seiscientas pesetas, y sin numerar, a cuatrocientas-, lo que no impidió que desde el primer momento en que se pusieron a la venta se acabasen.
Ya situados en el Pabellón es fácil vaticinar un enorme ambiente que, además, la Española ha querido triunfalizar entregando el trofeo de la Liga recién ganada al capitán madridista antes de empezar el partido. Esto, indudablemente, caldeará aún más el ambiente. Juez de todo será un árbitro de reconocida categoría, que no sólo dirigió finales europeas y mundiales, sino olímpicas, es decir, cuenta con el mejor palmarés. Se trata del búlgaro Artenik Arabadjan.
Ayer llegó el Emerson a Madrid, Yelverton. El fabuloso jugador de color recibió recientemente la noticia del fallecimiento de su padre y se trasladó urgentemente a Estados Unidos. Se espera que llegue esta mañana. Esto, unido a que -salvo verdadera necesidad- no jugará Meneghin, hace que el pronóstico se incline más aún del lado blanco. Toda la atención del aficionado está centrada en el Pabellón, en busca de una victoria de los blancos que les coloque directamente en Grenoble. Victoria que, en la frialdad de los números, debe llegar, ya que el Emerson tiene menos banquillo y se encuentra con los problemas ya citados en lo que se refiere a dos de sus grandes figuras: Meneghin y Yelverton.
El Bosna, finalista
El equipo yugoslavo Bosna de Sarajevo derrotó ayer por 88-83 al Olympiakos y se proclamó así finalista, junto al vencedor de hoy en el Pabellón. La FIBA, una vez más, no prohibió este partido adelantado, que, en caso de haber vencido el equipo griego, hubiese dado lugar a otras cábalas hoy. El Maccabi ya está descartado.
