El polideportivo de Fuenlabrada, ejemplo de mala gestión

Diecisiete meses llevan paradas las obras del polideportivo de Fuenlabrada. El presupuesto inicial, de 46 millones de pesetas, se ha visto aumentado en veinte más. El cambio en la alcaldía -septiembre de 1977- y el compromiso del Consejo Superior de Deportes de sufragar la mitad del importe, compromiso que se vio retrasado, son los factores fundamentales de esta situación, que no deja precisamente en buen lugar la gestión deportiva de instalaciones que se sigue en España.

Fuenlabrada no tiene instalaciones deportivas. En febrero de 1977 se acometió la empresa de construir un polideportivo sobre la base de una modélica pista de atletismo. El presupuesto era de 46 millones, de los que la mitad serían pagados por el Consejo dentro del cuatrienio 1978-82, por lo que el Ayuntamiento de Fuenlabrada dispuso del coste de las obras en su totalidad para que el polideportivo cumpliera cuanto antes con su cometido social.Siete meses después, con el 60% de la obra construida, los trabajos quedaron paralizados por falta de pago de unas certificaciones. Luis Martín había dejado la alcaldía a Juan Francisco Lorenzo y éste dispuso con el pleno que como ya se habían invertido veintitrés millones correspondía pagar el resto con el dinero prometido por el Consejo. Mientras esperaba la realización de esta promesa acometió otras empresas como la conducción de agua y el problema escolar. Mientras, el polideportivo quedó totalmente paralizado y ahora, el 22 de diciembre del pasado año, el alcalde firmó un nuevo contrato con el constructor, puesto que la documentación anterior -según Juan Francisco Lorenzo- no era correcta y no incluía además el cerramiento, la megafonía y la electrificación.

La realidad es que ahora terminar el polideportivo supone un desembolso aumentado. en veinte millones. El Consejo se ha comprometido a pagar la mitad de esta cantidad, además de conceder de inmediato trece de los veintitrés millones prometidos y los diez restantes en el transcurso de este año. Mientras, Fuenlabrada tiene como únicos terrenos deportivos dos campos de fútbol; la piscina, ya construida, se espera que esté en servicio para el verano. El polideportivo, además de cubrir las necesidades de los habitantes de Fuenlabrada, podrá estar llamado a ser un estadio más que pueda ser usado por los atletas de élite que a pesar de tener en Madrid las pistas de Vallehermoso y el INEF, tengan problemas de espacio para entrenarse, además de estar capacitadas las instalaciones para cumplir una labor social en Fuenlabrada, localidad que ya supera con mucho en población a diversas capitales.