Felipe González reta a Suárez a un debate en televisión
El primer secretario del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), Felipe González, retó anoche al presidente del Gobierno, Adolfo Suárez, a un debate en Televisión. El líder de Unión de Centro Democrático, por su parte, declaró en Cáceres que aceptaría el envite si le conviniera según el desarrollo de la campaña. Las actitudes de los señores González y Suárez son claros indicadores de la radicalización de la campaña, que pretende sustanciarse en la última semana como una elección de presidente de Gobierno.
Adolfo Suárez inició ayer su gira por Extremadura y Andalucía con problemas. Militantes o simpatizantes del PSOE, Coalición Democrática y Fuerza Nueva -entre otras personas- abuchearon e intentaron zarandear al presidente de UCD. Este incidente, junto al conocimiento que ya tenía el señor Suárez de la intervención de Felipe González en televisión, condujo al presidente del Gobierno a realizar los primeros ataques directos al primer partido de la oposición desde el inicio de la campaña electoral.Adolfo Suárez acusó al PSOE de eludir en la campaña electoral los compromisos contraídos en su XXVII Congreso. Los gritos de Fuera, fuera y Suárez, traidor, cantaste el «Cara al Sol» acompañaron al presidente en su recorrido por Extremadura.
Felipe González, en su intervención ante las cámaras de televisión, utilizó varios argumentos para conseguir un debate directo con Adolfo Suárez y trató de contrarrestar el lema electoral de UCD cumple. Otros miembros del PSOE, como Alfonso Guerra, manifestaron su oposición al Gobierno de coalición.
Luis Olarra, de Coalición Democrática, dijo ayer en Barcelona que el voto útil se debe dirigir antes al PSOE que a UCD. Asimismo, y dentro de esta coalición electoral, los señores Fraga y Osorio manifestaron su radical oposición a un Gobierno de coalición entre el PSOE y UCD. El señor Osorio llegó a afirmar que Coalición Democrática, según los resultados, podría formar un Gobierno con el PSOE.
Las informaciones del desarrollo de la campana para estas elecciones generales conducen a una radicalización de la campaña en la última semana, que trataría de enfrentar a los votantes, en la elección del 1 de marzo, como una opción de elegir presidente del Gobierno entre Felipe González y Adolfo Suárez.
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