Larra y "El conde de Montecristo"

«La segunda cadena de TVE está en franco proceso expansivo», dicen los del semanario oficial Tele-Radio. A partir de hoy se abre la programación de los sábados a las tres de la tarde. Se abre en vísperas electorales, mientras algunos altos ejecutivos, como el realizador Gustavo Pérez Puig, empresario de teatro y jefe de los dramáticos, han pedido unos veintitantos días «de permiso» (que no excedencia, según nos dijeron sus sustitutos) para ir a hacer la campaña de UCD. Pero se queda Sancho Gracia en imagen, con la reposición de Curro Jiménez, actor amigo del jefe de dramáticos y vinculado al mismo partido, y que también se va de campaña, quien también estará en antena después de las elecciones, cuando se reponga los sábados el programa Los tres mosqueteros.La programación de estos sábados constará de unas tres horas de reposiciones, los dibujos japoneses de El perro de Flandes (estilo Marco y Heidi) para que los niños pinchen el botón nada más terminar los también japoneses de El bosque de Tallac, de la primera cadena, zarzuelas realizadas hace diez años por Juan de Orduña y la novela en veinte capítulos de media hora, El conde de Montecristo, realizada por Pedro Amalio López, un hombre de izquierda a quien Pérez Puig elevó a su adjunto y pararrayos. Los responsables de la programación del UHF aseguran que lo importante es abrir el horario aunque haya que tragar las reposiciones. Tan sólo se incluye una retransmisión deportiva de noventa minutos a poder ser de las que envía Eurovisión, para que sea todo más barato. No hay un duro para producir programas, dicen. Sin embargo durante estos días se está repartiendo en Prado del Rey una gratificación de dieciocho millones de pesetas por los «excelentes» servicios prestados por algunos trabajadores en ocasión del referéndum constitucional. Los millones -que nadie se atreve a confirmar ni desmentir- hubieran sido más, caso de haber logrado mayor índice de abstención.

El conde de Montecristo fue realizada en 1969. Se emitió aquel mismo año, en veinte capítulos, a las nueve de la tarde. Después, en el verano de 1977 -después de las primeras elecciones-, TVE en el recuerdo la emitió en diez dosis de una hora con índices de aceptación muy altos. «Estoy hasta las narices -nos dice José Martín, el actor principal- del conde porque no tengo edad ni carácter para ser una vieja gloria. Además, cada vez que aseguran los ejecutivos que se va a comenzar la serie de Larra, pasa algo en el país y en TVE: elecciones, presupuestos sin dinero, etcétera. Yo lo que sí puedo decir es que el conde -y yo le conozco muy bien- ni es de UCD ni hace campaña para UCD. Yo sigo esperando a Larra. »

José Martín es el actor designado para interpretar a Mariano José de Larra. José Martín presentó el proyecto en Prado del Rey un día antes de la muerte de Franco. La serie fue aprobada el 8 de julio de 1976, como consta en una carta de Rafael Ramos Losada, entonces director de TVE y entusiasta de la serie. Se escribieron los guiones. Charo López espera interpretar a Dolores Armijo. Y el realizador Ramón Gómez Redondo tiene todo listo desde septiembre del 77 para empezar los rodajes. «Lo que a Larra le fastidió en vida le sigue matando ahora en este intento de llevarlo a la pantalla de TVE», añade José Martín, que recorrió todos los despachos, incluido el de Rafael Ansón y exceptuando el de Fernando Arias Salgado, el actual director general, de quien dice: «Es tan hermético que creo que no se ha visto él mismo ni en el espejo. »

Y así, mientras la segunda cadena se alimenta de reposiciones -por las que actores y directores no cobran una peseta- TVE arrincono se alimenta de reposiciones, por las que actores y directores no cobran una peseta, TVE arrinco-