Los vallecanos reivindican el derecho a crear su propia cultura
La Coordinadora pro Centro Cultural de Vallecas se reunió ayer a última hora de la tarde con el gobernador civil de Madrid, señor Rosón, para discutir el futuro del local ocupado hasta hace poco más de un año por la Jefatura Local del Movimiento, vacío desde entonces. La consecución del citado local ha aglutinado en su torno a una muy amplia representación de las fuerzas políticas, sindicales y sociales de Vallecas, que ven en su utilización popular lana baza efectiva para paliar la falta de equipamienlo cultural y recreativo que padecen las 500.000 personas que forman el pueblo vallecano.La Coordinadora la integran actualmente ocho asociaciones de vecinos, seis aulas de cultura, cuatro centros culturales, seis grupos de teatro, varios grupos de jóvenes y mujeres, tres organizaciones sindicales, diez partidos políticos y diversas personas a título individual, además del sindicato de jubilados y pensionistas de Comisiones Obreras. El edificio en cuestión está situado en la calle Peña Gorbea, y consta de veintiocho habitaciones, salón de actos, sala de juntas, bar y un gimnasio.
Desde hace un año vienen haciendo gestiones par.a que el local se ceda a la Coordinadora, bajo la forma de centro cultural, lo que significa que el Ministerio de Cultura aportaría una subvención para la realización de actividades, quedando en manos de los propios vecinos la gestión administrativa y la capacidad de decisión. Las diferentes subcomisiones de la coordinadora tienen ya redactado un programa corripleto de actividades, que abarca la música, artes plásticas, extensión cultural, estudios socioeconómicos de Vallecas, investigaciones culturales, cine, deporte, juventud, mujer, literatura, teatro, etcétera, la mayoría de ellas acompañadas de cursillos de formación.
La decisión sobre el futuro del local corresponde al Gobierno Civil, como representante del Ministerio del Interior, su propietario legal. En estos días se barajan diferentes alternativas: el Ayuntamiento podría hacerse cargo del local y montar un centro social, el Ministerio de Cultura podría dedicarlo a casa de cultura. Este último organismo parece que no ha presentado petición en firme, y prefiere apoyar económicamente a quien se le adjudique finalmente.
La Coordinadora no admite otra solución que no sea la suya. En una nota de prensa explica que el pueblo de Vallecas padece desde siempre una carencia de equipamientos sociales casi total, y que no se trata de ir a recibir atenciones a un centro municipal, en el que los vecinos tendrían sólo un papel pasivo, sino de administrarlo ellos mismos, promoviendo así la participación de todos los grupos sociales interesados en perfilar y dotar de contenido una cultura popular. La asamblea tiene, ya aprobadas sus normas de funcionamiento, incluida la mención a minusválidos y ancianos, a los que no se considera como sectores especiales por sus características -lo que sería reproducir la misma marginación oficial-, sino que participarán de todas las actividades y decisiones con plenos derechos y deberes.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.