Trasladados a Madrid siete detenidos en relación con los últimos atentados de ETA

Seis personas más fueron detenidas ayer en Bilbao y Basauri como consecuencia de las investigaciones policiales realizadas en torno a los atentados ocurridos la pasada semana. Dos de ellos, José Aguirre e Ignacio Altuna, fueron trasladados ayer mismo a la comisaría de San Sebastián, por ser naturales de la localidad guipuzcoana de Azpeitia, en tanto que los cuatro restantes, Javier Arteche, Fernando Fernández, José Angel Romero y Joseba Cos, permanecían en las dependencias de la Jefatura Superior de Policía de Bilbao.Por otra parte, las otras siete personas que habían sido detenidas el sábado último en varias poblaciones vizcaínas fueron puestas ayer a disposición del juez de guardia de Bilbao, que se inhibió en favor de la Audiencia Nacional y que, en virtud de una interpretación literal de decreto-ley antiterrorismo, ordenó el inmediato traslado a Madrid no sólo de las diligencias, sino también de los propios detenidos.

Esta decisión ha sorprendido extraordinariamente en medios jurídicos, ya que hasta ahora el juez remitía a la Audiencia Nacional los presuntos casos afectados por el decreto-ley antiterrorismo, pero se hacía cargo de los detenidos, que ingresaban en la respectiva prisión provincial.

A juicio de los abogados defensores, este trasladado inmediato de los detenidos a Madrid plantea serias dificultades para ejercitar la defensa y puede originar delicadas situaciones de habeas corpus, al mismo tiempo que impide el seguimiento de algún posible caso de malos tratos. En última instancia, se priva al juez natural de un control sobre el detenido.

Esta decisión del juez titular del número 4 de Bilbao, Jesús Estévez, parece haber obedecido a un acuerdo adoptado hace cinco meses por la junta de jueces de la Audiencia Provincial. En aquella ocasión, los jueces de la capital vizcaína se sintieron directamente aludidos por unas declaraciones de Martín Villa en las que venía a decirse que se había puesto en libertad a varios peligrosos terroristas de ETA. Se trataba de varios presuntos miembros del comando Mendizábal. Como consecuencia de la intervención del ministro se revisó el caso y la Audiencia Nacional ordenó el ingreso en prisión de tres personas que previamente habían sido puestas en libertad por un juez de Bilbao.

Respecto a las siete personas trasladadas anoche a Madrid, sus familiares han informado que no pesan sobre ellos acusaciones directamente relacionadas con los atentados de la pasada semana, ya que todos ellos han demostrado suficientemente que no pudieron participar en ellos.