La soviética Bardauskine, batió el récord mundial de longitud

Comenzaron ayer los campeonatos europeos de atletismo al aire libre, con cara y cruz para los españoles y un ligero incidente en el protocolario desfile de participantes. Los atletas de la República Federal de Alemania no desfilaron porque el cartel anunciador de su equipo decía RFA y no Alemania, como ellos pretendían. La actuación española fue decepcionante por parte de Carmen Valero y muy buena por parte de Alonso, que se clasificó para las semifinales de 400 vallas, con nuevo récord nacional eléctrico. En la primera jornada bubo récord mundial en longitud femenina, con un salto de la soviética Bardauskine, que llegó a los 7,09 metros.

Carmen Valero quedó antepenúltima en la final de 3.000 metros. Ya en la tercera vuelta quedó descolgada y pasó del undécimo puesto al vigésimo quinto. Perdió paulatinamente puestos sin lucha y capacidad de reacción. Su tiempo fue de 9-34-00, muy lejos de lo que ella podía hacer, que era haber rebajado su récord nacional, ya que estaba preparada para bajar de los nueve minutos.Alonso, sin embargo, deparó una agradable sorpresa. Se clasificó para las semifinales de 400 vallas cuando le correspondió en suerte una serie en la que tenía el quinto mejor tiempo. Entró segundo con 50-27, que mejora en 44 centésimas el récord nacional eléctrico que ya poseía. Entró tras el soviético Archipenko, 50-15, e hizo el tercer mejor tiempo de los veintisiete atletas participantes -el primero correspondió a Schmid, de la República Federal de Alemania, con 49-78-. Alonso corrió por una calle que le va bien, la tres, y tuvo una última curva soberbia. Esta tarde correrá las semifinales en busca de un puesto para la final, lo que le obligaría a batir nuevamente su récord.

En longitud femenina hubo récord mundial a cargo de la soviética Bardauskine, que con 7,09 en la clasificación, en la que sólo se pedía 6,40, batió por dos centímetros el récord mundial que ella tenía. Voigt, su rival de hoy en la final, saltó 6,44.

Una prueba interesante fue la de 400 metros femeninos con Marita Koch e Irene Szewinska. Entraron primera y segunda, respectivamente, con unos cómodos tiempos de 52-95 y 53-14, para clasificarse en las semifinales, El mejor tiempo en las series correspondió a la soviética Kuoconova, con 51-54.

Oriol y Marín, en la jornada de hoy

Dos españoles, además de Alonso, actuarán en la segunda jornada de los campeonatos, que se celebrará hoy. Oriol lo hará en la calificación de pértiga y Marín en la final de veinte kilómetros marcha.

Oriol tendrá que saltar 5,25 para clasificarse, lo que significaría un nuevo récord de España. Posibilidades tiene porque tras los entrenamientos celebrados en Hannover está como para saltar 5,30. Serán veinticuatro los pertiguistas que actuarán y entre los que se encuentran Kozakiewiez, Slusarski, Trofimenko y Kalliomaki.

José Marín disputará la final de veinte kilómetros marcha, que tiene un recorrido infernal y donde abundarán las descalificaciones, a consecuencia de una bajada pronunciadísima que hay. Marín tiene el séptimo mejor tiempo de los veinticuatro marchadores finalistas.

La segunda jornada de los campeonatos tendrá seis finales: las masculinas de 100, jabalina y la referida de veinte kilómetros marcha, y las femeninas de 100, peso y longitud. Las pruebas de 100 metros celebrarán también hoy sus semifinales. En hombres se prevé una enorme lucha para la final entre Mennea (10-49), Ray (10-30), Welss (10-40), Petrov (10-40), Kolesnikov (10-49), Borzov (10-50) y Woronin (10-50). Entre paréntesis figuran los tiempos que consiguieron en las series de ayer. La jabalina, por su parte, tendrá su particular batalla entre el recordman mundial, Nemeth, y Wessing, un alemán de la República Federal, que lanzó esta temporada 94,21, nueve metros más que el húngaro. Ambos se clasificaron ayer para la final, superando los ochenta metros al primer intento.