El aeropuerto de Mallorca, cerrado al tráfico internacional

La huelga general de celo de los controladores aéreos franceses, que se mantiene desde hace dos días para apoyar sus reivindicaciones laborales originó ayer el caos en toda Europa occidental, dada la coincidencia con el inicio de las vacaciones estivales de varios millones de europeos. Todo el tráfico del norte y centro de Europa hacia los países del Mediterráneo se vio seriamente afectado, originando colapsos insalvables en la mayoría de las capitales de Europa. España, uno de los países receptores de mayor número de turistas, ha sido perjudicada hasta tal punto que Palma de Mallorca tuvo que cerrar a las cuatro de la tarde de ayer su aeropuerto a los vuelos internacionales.A esa hora, la zona de aparca miento aéreo del aeropuerto mallorquín se hallaba totalmente saturada -más de cien aviones permanecían en sus pistas esperando la orden de vuelo-, por lo que las autoridades del aeropuerto decidieron cerrar el tráfico a los vuelos internacionales, dejando únicamente en servicio los vuelos nacionales. Gracias a las órdenes impartidas a los turistas de no abandonar sus hoteles hasta que les fuera confirmada su hora de vuelo no se produjeron mayores escenas de caos en la terminal. El problema del aeropuerto mallorquín, que hoy puede alcanzar su máximo punto, ya que estaba previsto el tráfico de quinientos aviones, se ha repetido en otros aeropuertos españoles y europeos, donde miles de turistas esperan poder iniciar sus vacaciones.