Paquirri, un chico agradecido

«Señor director de Televisión: muchas gracias por la ayuda que presta a la fiesta. Brindo ademá la muerte de este toro por la unidad y la paz de España, por la que entregaría mi vida si fuera preciso.» Este es, muta mutandi, el brindis de Paquirri en la pasada corrida que TVE transmitió desde Barcelona.Muchas gracias por la ayuda que Televisión presta a la fiesta. Porque uste lo diga. Televisión no presta ninguna ayuda a la fiesta sino que la discrimina y cuando se acuerda de ella es para pegarla un revés. Un libro lleno de grandes frases sobre los propósitos del staff del medio acerca de los toros podría escribirse, y ni media cuartilla sobre la realización de los mismos.

«Habrá información sobre las corridas» -oímos decir, una vez y mil-. Y normalmente se da en determinados telediarios, de un tiempo a esta parte. O no se da, depende. En el de las 10 del domingo último, por ejemplo, aunque hubo por la tarde numerosos festejos, algunos de importancia, y cogidas, no dieron información.

Cabe que lo del turno de gracias al director de Televisión fuera una ironía de Paquirri, pero no lo creemos en absoluto, porque después vino el brindis por la unidad y la paz de España, donde la ironía no es ni imaginable, y aun menos en Paquirri. El agradecimiento habría de ser, más bien, porque Paquirri participó en esa corrida, y el día anterior en la de La Línea, asimismo televisada, lo cual es doblete de privilegio, que le habrá producido saneados beneficios, pues aquella casa paga con largueza en estos casos. Paquirri cumple bien con lo menos que se puede ser en la vida: agradecido. Pero debió cambiar su brindis al director de TVE y decir: «Muchas gracias por la ayuda que presta a Paquirri, etcétera.»