Carrillo: "Yo espero que el Gobierno no gire a la derecha"

Santiago Carrillo se mostró reacio a opinar que el último reajuste ministerial podría suponer un giro a la derecha del Gobierno de Adolfo Suárez, en una entrevista concedida el domingo en Avilés: «Antes de la crisis -nos dijo el secretario general de PCE- se podía observar una inflexión hacia la derecha, pero espero que este Gobierno no se oriente aún más en esta dirección, porque perdería apoyo popular y los votos recibidos de la izquierda el 15 de junio, con lo que podría llevar al país a un peligroso bipartidismo entre el centro-derecha y el centro-izquierda.»«Creo que la opinión de Fuentes Quintana, como asesor económico del presidente, seguirá pesando bastante -continuó. Por eso, posiblemente la política de este Gabinete no cambie mucho en relación a la anterior. A mí me parece que, con la crisis, Suárez trató de controlar personalmente la situación y la actuación de cada uno de sus ministros.»

Lo que ha sorprendido al dirigente comunista es la entrada de Rodríguez Sahagún en el Gobierno: «Una vez más hay que decir -se lamentó- que en este Gobierno están representados los empresarios, pero no los trabajadores.»

Solicitada su opinión sobre la actitud de los socialistas ante los pactos de la Moncloa, Carrillo respondió: «Con tal de que UCD pierda votos, el PSOE prefiere que esos acuerdos, que firmó, no se cumplan. Nuestra política es distinta, porque cuando exigimos su cumplimiento lo hacemos a partir del análisis de la situación de los trabajadores españoles, y no en función de los votos que podamos ganar o perder.»

Para Carrillo, el deterioro de imagen de UCD afecta también al PSOE, «porque con 118 diputados se es también responsable del Gobierno. Además de ejercer el papel de Oposición, hay que exigir a los gobernantes que mejoren la situación. Si nosotros tuviéramos ese número de diputados, habría otra política en este país».

Carrillo se refirió en la entrevista a su última reunión con los militantes de Oviedo, en la que fue duramente contestado: «Bueno, es cierto que hubo discusión, hay algunos camaradas jóvenes que confunden la democracia en el partido con la democracia directa. Sería imposible que la dirección del PCE consultara a todas las agrupaciones locales del país antes de firmar los pactos de la Moncloa. Hay que tener en cuenta, además, que cuando hablamos de Oviedo no nos estamos refiriendo a toda la región. En cualquier caso, si alguien piensa que eso es un síntoma de descomposición del partido se equivoca.»