Equidazu podría ser presidente de la Federación Española

José Antonio Eguidazu, ex presidente del Athletic de Bilbao, y presidente de la Comisión Olímpica de Fútbol y Ciclismo, podría ser el sucesor de Pablo Porta en la Federación Española. Pablo Porta anunció hace unos días su intención de abandonar la presidencia de la Federación Española el próximo mes de julio, con motivo de la asamblea general a la que presentará su cargo.Pablo Porta ha razonado su decisión al decir que se habían cumplido para entonces los objetivos propugnados al hacerse cargo de la presidencia de la Federación, cargo en el que ha permanecido dos años, uno de ellos designado y el otro elegido democráticamente.

Una de las personas suficientemente preparadas para ocupar la vacante de Pablo Porta y, sobre todo, para continuar y desarrollar la labor del actual presidente de la Federación, sería José Antonio Eguidazu, que ya demostró su capacidad y categoría de dirigente a través de los cuatro años que presidió el Athletic de Bilbao. El club bilbaíno, en esos cuatro años, fue presentado como ejemplo a seguir para el fútbol español. Eguidazu dejó la presidencia del club el pasado año, cuando el equipo estuvo a punto de obtener el título de campeón de la Copa de la UEFA y consiguió un superávit de más de ochenta millones de pesetas, hecho insólito en nuestro fútbol,

Eguidazu, aunque dejó el Athletic de Bilbao, continúa ligado de alguna forma al deporte y sobre todo al fútbol. Fue elegido miembro del Comité Olímpico Español y después presidente de la comisión de trabajo dedicada al fútbol y al ciclismo.

Los clubs más importantes de Primera División, en más de una ocasión, no se han recatado en apoyar a Eguidazu, a pesar de la situación que en su día creara la denuncia de los falsos oriundos. El hecho de que el Athletic de Bilbao y la Real Sociedad salieran con su razón por delante, granjeó a Eguidazu varias simpatías. Cuando dejó su cargo de presidente del Athletic de Bilbao, algunos clubs de primera defendieron y apoyaron su candidatura para que fuese elegido miembro de la junta directiva de la Federación por parte de Pablo Porta. Eguidazu y Porta almorzaron un día en Barcelona y el tema de la conversación fue precisamente ése. Porta apoyaba también tal propuesta, pero Eguidazu, según parece, creyó oportuno desestimarla porque su antiguo club no consiguió representación alguna ante los órganos federativos.

José Antonio Eguidazu, durante los cuatro años que presidió el Athletic de Bilbao, demostró en numerosas ocasiones una política deportiva sincera y clara, ajena a cualquier interés propio, como podría haber sido el de su club. Sus actuaciones en las asambleas generales sorprendieron a todos, poniendo de manifiesto una nueva clase de dirigentes de clubs. Todas estas circunstancias han convertido a Eguidazu en ser considerado corno la persona más idónea que puede suplir a Pablo Porta. De todos modos Eguidazu, hasta este momento, se considera al margen de cualquier posibilidad.