La estrategia hacia la unidad socialista rompe en tres frentes al PSP

El Partido Socialista Popular (PSP) ha condicionado su adhesión a los acuerdos de la Moncloa al cumplimiento de los fines previstos, y ha criticado la interpretación unilateral y la aplicación parcial que viene haciéndose. En la reunión de su comité ejecutivo - que concluyó a primera hora de la madrugada de ayer- el PSP criticó también el borrador constitucional y consideró la necesidad de cumplir las decisiones de su III Congreso, encaminadas a la unidad del movimiento socialista español. El tema de la unidad socialista originó tensiones en la reunión de ayer, que permiten asegurar una ruptura de partidos en tres frentes, capitaneados, respectivamente, por Enrique Tierno, Raúl Morodo y Fernando Morán, estos dos últimos partidarios, desde diferente estrategia, de la integración con el Partido Socialista Obrero Español (PSOE).

El sector polarizado en torno a la figura del profesor Tierno cuenta con el apoyo esencial de las federaciones de Madrid y de Valencia y mantiene una posición ideológicamente más pura y políticamente más a la izquierda. La unión con el PSOE se ve desde esta perspectiva como una tentación socialdemocrática y las negociaciones sólo se aceptan en situación de absoluta igualdad.Los sectores más favorables a la unión con el PSOE se desglosan en dos diferentes vías. Por una parte, Raúl Morodo, que cuenta con mayoría en el comité ejecutivo, se ha erigido en símbolo de la voluntad unitarista, si bien su línea política socialdemocrática podría hacerle desembocar en fuerzas situadas a la derecha del PSOE. De hecho, parece cierta su aspiración a una embajada, deseo que está siendo bien acogido en el Gobierno, y concretamente por parte del ministro de Asuntos Exteriores.

Por último, el tercer sector del PSP - que protagonizaría la segunda vía unionista -, agrupado en torno a Fernando Morán y otros colaboradores de los tiempos difíciles del profesor Tierno, se muestra partidario de una negociación digna pero decidida con el PSOE. Algunos de los más destacados promotores de esta iniciativa participaron en la gestación de los acuerdos de la Moncloa, durante la cual el propio líder del PSOE Felipe González, vio más próxima la posibilidad de unidad socialista, según reconoció públicamente a semana pasada. Asimismo EL PAIS pudo saber que antes de iniciar la etapa final de aproximación al PSOE este sector celebrará conversaciones en los próximos días con el presidente del partido, Enrique Tierno, a fin de clarificar definitivamente las respectivas posiciones.

Por otra parte, para mañana, lunes, está prevista una reunión del comité permanente para la unidad socialista.

En el fondo de la reunión última del comité ejecutivo del PSP estuvieron presentes estas tensiones, que hoy volverán a reproducirse muy probablemente a propósito de Ia asamblea que celebrará la Federación de Madrid. En ella está previsto estudiar los distintos comunicados hechos públicos recientemente por diferentes sectores de la misma en relación con la petición de dimisión de Raúl Morodo.

Las escisiones puestas de manifiesto en el seno de la Federación madrileña, uno de cuyos más polémicos capítulos estuvo protagonizado en los últimos días por el llamado colectivo de prensa de la misma, deberán estudiarse en el ámbito en que se han producido, y sólo después de que la ejecutiva de Madrid adopte las medidas oportunas, intervendrá la ejecutiva nacional. Así se decidió en la última reunión, en la que el comité ejecutivo del PSP se negó a estudiar de manera formal la situación interna de la Federación de Madrid.

Acuerdos del comité ejecutivo

Por lo que se refiere a los acuerdos concretos adoptados por el citado comité, la nota hecha pública ayer alude a las críticas al desarrollo de los acuerdos de la Moncloa, al estudio del borrador de la Constitución y a la postura del partido sobre las elecciones municipales y la unidad socialista.En relación con los pactos de la Moncloa, el PSP ha denunciado la actitud unilateral del Gobierno en la interpretación y aplicación de los mismos y ha propugnado que una comisión de los partidos firmantes pueda reconsiderar el decreto-ley sobre política salarial. El PSP estima que la aplicación parcial del principio de retroactividad se ha hecho en perjuicio de los sectores populares, sin que haya abarcado, en cambio, a otros aspectos, como el fiscal o el de la Seguridad Social.

Sobre el borrador de la Constitución, el comité ejecutivo del PSP considera que «no responde al principio fundamental de que las normas constitucionales deben expresar en el orden jurídico- político los factores reales que definan las relaciones de poder, las exigencias culturales, la estructura social y la dinámica de la convivencia de la comunidad española en la actualidad». Asimismo, estima que el texto citado no responde al progreso de las ideas ni a las exigencias de los sectores políticos de izquierda, sino que configura una Constitución demoliberal y anticuada.

El PSP expresa sus «serias reservas» sobre su participación en los debates de la comisión constitucional y anuncia el borrador propio que elabora el partido. Es posible también una enmienda a la totalidad del proyecto de Constitución, si no modifica sustancialmente las características actuales.

Cara a las elecciones municipales, el PSP afirma la conveniencia de establecer una plataforma electoral unitaria entre las fuerzas progresistas y socialistas.

Sobre la unidad socialista, el comité ejecutivo - midiendo las palabras- expresa el deseo firme de que «se inicien conversaciones formales encaminadas a definir los términos que permitan llevar a cabo un proceso de convergencia...»