Ciento cincuenta mil pesetas a los vencedores de Rumania

La Federación Española de Fútbol debe ser una de las pocas, o la única de las Federaciones Nacionales que no está agobiada por angustiosos problemas económicos. Por lo menos así lo demuestra ante la generosidad con que está dispuesta a recompensar a los jugadores que el miércoles vencieron a Rumania. Posiblemente pagará 150.000 pesetas a todos aquellos que jugaron, y 100.000 a los que figuraron en el banquillo de los suplentes. Kubala percibirá, como siempre, el doble que los jugadores.No es de extrañar, por tanto, que el hombre de la economía federativa, Gregorio Paunero, llegue a confesar: « Estamos apurados». La recaudación del encuentro frente a los rumanos, con 7.200.000 pesetas, ha sido un alivio ante esos dos millones y medio que los jugadores y el entrenador se llevarán de «prima».

De todos modos, hay que explicar que la totalidad de los jugadores convocados por Kubala, antes de saltar al terreno de juego, por el mero hecho de permanecer algunos días concentrados, tenían aseguradas 50.000 pesetas, incluidas en la totalidad de la «prima» que hemos facilitado.

Serán, por tanto, los propios aficionados que asistieron al encuentro quienes pagarán, con su dinero, las suculentas «primas» de los jugadores. Los aficionados pagan y los jugadores cobrarán el próximo día 5 de noviembre, después de que el día anterior la junta directiva, a propuesta de Paunero, apruebe esas cifras. Realmente, los federativos, quizá influidos por el triunfo, se muestren tan generosos y espléndidos que decidan aumentar en 25.000 pesetas la «prima» establecida la pasada temporada, antes de que se iniciase la fase previa del Mundial de Argentina.

Entonces se acordó que los, triunfos producidos en casa tendrían una recompensa de 75.000 pesetas y 150.000 por las victorias obtenidas en terreno contrario. Estas cifras serían duplicadas si España asegurase su presencia en Argentina. Pero en estos momentos de euforia y sobre todo de esperanza, necesitados de triunfo, la Federación ha pensado que el aumento sustancial de esas primas establecidas será un gran estimulante para unos jugadores profesionales que además defienden los colores nacionales.

Los jugadores cobran con toda puntualidad, a pesar de que el Consejo Superior de Deportes arrastra una deuda de doscientos millones sobre los 680 que la Federación presupuestó hasta el final de este año. En estas cifras, además, no están incluidos los quinientos millones que se deben desde 1972 en concepto de construcción de terrenos de juego.