Desinterés español por las fuentes energéticas no convencionales
ENVIADO ESPECIAL, Las comunicaciones de los treinta ponentes que intervinieron en estas jornadas, se centraron en los problemas técnicos de la producción de energía, ofreciendo los últimos avances logrados en cada una de las tecnologías consideradas como alternativas a las denominadas fuentes convencionales, concretamente el petróleo, el carbón, la hidráulica y la nuclear.
«Nos hemos limitado a exponer un cúmulo de datos, aportados por expertos nacionales y extranjeros, para que a partir de allí se pueda intentar elaborar una nueva estrategia de la producción de energía», manifestó el científico catalán y organizador del simposio, Joan Oro.
En el simposio, ha quedado, de manifiesto la viabilidad de las energías blandas: solar, eólica, geotérmica y de aprovechamiento de residuos, y también la poca atención qué la política energética española dedica a estos temas. Tanto el profesor Ortiz, miembro de la Sociedad Catalana de Ciencias, que habló sobre las posibilidades geotérmicas en España, como diversos participantes en los coloquios, denunciaron el poco apoyo oficial a lo que podrían ser nuevas fuentes de energía.
Sin embargo, el simposio ha dado un mínimo de esperanzas, dejando entrever las posibilidades de ir incorporando estas nuevas técnicas. Sobre este punto, el conferenciante, O'Rouske, de la Administración Federal de Energía, de los EEUU, manifestó que el Plan Nacional de Energía de Carter insistía en la necesidad de reducir la expansión de la tecnología del plutonio y de los reactores reproductores rápidos, así como el potenciar el desarrollo de las denominadas energías blandas.
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