"Telefónica no puede frenar sus planes de expansión"

El problema con que se enfrenta la Compañía Telefónica, en lo que respecta a su financiación, consiste en la necesidad de encontrar vías suficientes para cubrir las inversiones que requieren los planes de expansión de la Compañía y que para el próximo año alcanzará los 86.000 millones de pesetas. Según el presidente de la CTNE, señor García Baxter, las cuatro fórmulas utilizadas para financiar las inversiones son las autofinanciación, la ampliación de capital, la emisión de obligaciones y los créditos extranjeros. En este sentido señaló que las cuatro fuentes se complementan simultáneamente en la actual situación de la economía española. En este sentido, Telefónica tiene programada una ampliación de capital para este año aunque no se sabe ni cómo ni cuándo se realizará ésta.Sobre la posibilidad de detener los planes de expansión de la Compañía, su presidente aseguró que esto no es posible en una situación de paro como la que atraviesa España. En este sentido señaló que en la actualidad existen 600.000 peticiones de teléfono que no pueden ser desatendidas por lo que ello supondría. Igualmente recalcó que la detención de la expansión afectaría a las compañías summistradoras que mantienen unas plantillas elevadas.

Se refirió a continuación el presidente de la CTNE a los usuarios y marcó cuatro prioridades en este sentido: la necesidad de atender a las peticiones de instalación, ofrecer buena calidad en los servicios, precio adecuado y atención al usuario. Las conclusiones sobre estas cuatro prioridades que el presidente hizo fueron todas positivas en comparación con el resto de los países.

Pasó a continuación a defender a la Compañía de los ataques de la OCU sobre la necesidad de publicar las tarifas nuevas en el BOE y la homologación de los contadores. Con respecto al primero de los temas, el señor Allende señaló que no existe obligación alguna en publicar estas tarifas en el BOE, aunque la CTNE está dispuesta a hacerlo así en cuanto el Gobierno lo, exija, ya que éste es un tema de su competencia.

Sobre los contadores homologados, el argumento fue similar, resaltando que, aunque no existe homologación oficial, sí existe una homologación tácita con los aparatos utilizados por el resto de las compañías europeas. Igualmente, el contador ha sido homologado por entidades técnicas solventes en nuestro país. Puso de relieve, igualmente, que colocar contadores en todos los teléfonos existentes en España supondría una inversión de 26.000 millones de pesetas.

Se refirió por último al tema de la facturación detallada, apuntando que sólo cuatro países cuentan con un proceso de facturación de este tipo. Apuntó que poner en marcha la reestructuración de todos estos servicios para conseguir una facturación detallada supondría unas inversiones de 10.000 millones de pesetas.