La Unión do Pobo Galego ratificó su línea marxista y nacionalista

El Congreso de Unión do Pobo Galego (UPG) ha ratificado en su clausura la línea de la dirección del partido, nacionalista y marxista-leninista, confirmando en sus puestos a los responsables y eligiendo por vez primera a su presidente, puesto que ocupa Bautista Alvarez, de Vigo.Aun cuando UPG había anunciado que el congreso sería abierto a los medios informativos en las sesiones de apertura y cierre, las dificultades que ha puesto para su celebración el Gobierno Civil han hecho que no se cumpliera esa previsión. Incluso algunas fuerzas políticas invitadas no han asistido a los debates políticos por la misma causa, después de que el gobernador amenazara a la Intersindical Nacional Gallega si se celebraba en sus locales el congreso del partido ilegal -en contacto con los grupos nacionalistas más intransigentes, firmantes de la carta de Brest-. El congreso comenzó en un cine, en una pequeña localidad próxima a Vigo. Horas después, la Guardia Civil desalojaba el local, lo que ha provocado protestas del Partido Socialista Galego, Liga Comunista Revolucionaria y otros grupos. El congreso, según la dirección de UPG, ha confirmado que todas las disensiones de que se viene hablando son ajenas al partido.

«Ha habido debates políticos absolutamente democráticos -ha manifestado-, y nadie ha planteado el tema.» Se ha aprobado, pues, el planteamiento actual que pretende consolidar UPG, nacido hace trece años como un partido comunista gallego.