Búsqueda febril de un nuevo extranjero

El fichaje de un nuevo jugador extranjero -Platini, Bochini, Bonhof, Simmonsen, Torstensson...- es la obsesión del Valencia en esta pretemporada. Marcel Domingo, uno de los entrenadores más capacitados y a la vez más polémicos de nuestro fútbol, es, en principio, su mejor refuerzo.

El primero de septiembre se cierra el plazo de inscripción de jugadores extranjeros. El Valencia, que dio la baja a Rep la temporada pasada, aún no ha encontrado el hombre con quien sustituirle. Bonhof, su sueño dorado, no ha podido ser, y la directiva valencianista -que sigue tan larga de millones como hace un año- está entregada estos días a la búsqueda febril de un nuevo fenómeno extranjero.Marcel Domingo, ex guardameta francés que ingresó en nuestro fútbol cuando aún estaba en activo y ofreció un excelente rendimiento en el Atlético y el Español, y que como entrenador ha hecho toda su carrera en España, es el hombre que dirigirá al Valencia. Un excelente entrenador, aunque de carácter violento. De Burgos -su anterior equipo- se trajo tres hombres: el meta Manzanedo, el lateral Palmer y el centrocampista Cabral, paraguayo, y éstos son los únicos fichajes del club por el momento. Con respecto al año pasado, no obstante, se espera una mejora sustancial en la calidad de la plantilla, porque se da por segura la progresión de los jóvenes Botubot -central-, Arias -centrocampista- y Eloy -extremo.

El Valencia es un club que ha oscilado siempre entre la zona media y la alta. Ha conseguido cinco títulos: cuatro de ellos en los años de la posguerra, cuando atravesó la mejor época de su historia; el quinto ha sido mucho más reciente, hace cinco años, con Di Stéfano como entrenador. El año pasado gastó una millonada en refuerzos con el fin de luchar por el título, pero las cosas no le salieron bien, y se quedó sin plaza siquiera para la Copa de la UEFA. Este año ha aumentado su presupuesto a cuatrocientos millones, y busca de nuevo el título.

Mario Alberto Kempes, argentino de veintitrés años, fichado hace un año, es el divo del conjunto. Pero un divo sin defectos propios del divismo. Se trata de un jugador, de enorme planta, preciso toque de balón con la izquierda y magnífico remate en todas las posiciones. Fue el máximo goleador de la Liga pasada. Junto a él, el paraguayo Diarte es toda una incógnita. Empezó la Liga pasada a todo gas y luego las lesiones y su poco gusto por el sacrificio anularon gran parte de sus condiciones.

La plantilla para esta temporada es la siguiente:

Porteros: Manzanedo, Pereira y Balaguer.

Defensas: Carrete, Botubot, Castellanos, Palmer, Cordero, Cerveró, Domingo, Higinio y Jesús Martínez.

Centrocampistas: Adorno, Juan Carlos, Claramunt, Cabral (paraguayo), Lleida, Arias y Saura.

Delanteros: Eloy, Kenipes (argentino), Diarte (paraguayo) y Valdez (argentino).

El Valencia es, cara a la Liga que comienza, una incógnita, como lo era antes de comenzar la pasada. Su plantilla está cargada de calidad en principio, y lo estará más aún si por fin hay un fichaje, pero no es fácil predecir su rendimiento por la irregularidad de algunos hombres. El club busca especialmente un delantero, pues ésta es la línea en la que tiene menos hombres, aunque de categoría. Dos hombres del Borussia, Simmonsen y Torstensson, parecen ser ahora sus objetivos. Por el momento, en el Trofeo de la Naranja el juego del equipo gustó y el público se volcó en aplausos. Kempes, a quien Márcel Domingo ha retrasado a la inedia para que cumpla funciones de organizador, puede ser una gran novedad en la Liga si se adapta, como parece en principio, a estas funciones.