El mejor fichaje, no traspasar a Solsona
El Español enfila sin excesivas novedades la temporada 1977-78. Sus pretensiones deportivas son idénticas a la temporada anterior: quedar clasificado para una competición europea, presumiblemente la Copa de la UEFA. El mejor fichaje que han realizado, en boca de un dirigente, «es no haber traspasado a nadie», pese a las ofertas o contactos mantenidos por intermediarios hacia algunas de sus figuras, concretamente, Solsona y Marañón. Paradójicamente, el hombre que ellos hubieran querido negociar, el chileno Carlos Caszely, no ha despertado interés entre los clubs grandes.
Son las novedades más importantes para 1977-78. Al margen, existen otras caras nuevas, como Huertas, y algún joven en alza (Padilla), que podrían tener su chance a lo largo del campeonato, en algún que otro partido aislado. Fundamentalmente, el equipo va a ser el mismo de unos meses antes, con la presumible inclusión del ex salmantino Lanchas en algún puesto de la defensa, bien sea en el lateral derecho, o como libero. Santamaría no ha querido dar ninguna pista, y para mayor desorientación no lo hizo jugar en el Torneo Ciudad de Barcelona, alegando que los jugadores suelen ponerse nerviosos cuando debutan ante su propia afición, y es preferible que vaya fogueándose en partidos de fuera. El argumento puede sonar a excusa o reflejar la realidad. Eso se sabrá con el paso de los días. Lo más probable es que Lanchas debute en el Torneo Ciudad de Zaragoza, y si no lo hace será un mal síntoma.La otra novedad, aunque relativa, es Flores, protagonista de un conocido affaire a nivel de clubs, en el que estuvieron mezclados Salamanca, Jaén y Español. El ariete se ha quedado en su club de origen, y en la final del torneo españolista, frente al Rapid de Viena, consiguió un gol de bandera que le ha convertido, automáticamente, en un jugador de moda entre la afición. El problema va a ser ahora para Santamaría, ya que, en principio, el número «9» lo iba a lucir en la espalda el negrito brasileño Jeremías.
La anterior temporada, el Español tuvo que desprenderse del defensa internacional Ramos, que pasó al Barcelona por la cantidad de treinta millones, cifra aproximada del déficit arrastrado a lo largo del ejercicio. En esta última campaña, el club ha tenido pérdidas, pero ha podido compensarlas con la firma de un ventajoso contrato con una agencia de publicidad. Este dinero -que se habla de veinticinco millones- no sólo permitió cubrir el déficit, sino que ha servido para realizar los fichajes de Lanchas (diez millones) y Flores (once millones).
Se especuló con el traspaso de Daniel Solsona, capitán y figura del equipo, pero el presidente, Meler, se ha negado en redondo a hablar del asunto, ya que el Español, según sus propias palabras, sólo vendería en caso de necesidad económica perentoria, cosa que no se produce actualmente. La idea del presidente es formar un equipo lo más fuerte posible y hay que recordar que hace dos años el Español fue líder de fichajes, desembolsando setenta millones de pesetas para conseguir a los jugadores Fernández Amado, Caszely, Verdugo y Ozorio.
Los suramericanos
El Español tiene en sus filas a varios suramericanos. De Paraguay, concretamente, están: «Gato» Fernández, Ortiz Aquino y Ozorio. De Brasil, Jeremías. De Argentina, Longhi. Y de Chile, Carlos Caszely. En la formación titular, hay poca representación catalana: sólo Solsona, el capitán, y Flores, en el caso de que llegue a hacerse con un sitio. El más veterano es De Felipe, con 33 años, y el más joven Angel, con dieciocho. Es un conjunto de una media de edad de veintiséis años, con experiencia y una cierta veteranía en algunos de sus elementos. Dato anecdótico: varios de sus componentes proceden del Real Madrid: tal es el caso de Verdugo, Marañón. De Felipe y el portero José Luis Borja, que lleva diez meses en el dique seco, por lesión.
El jugador que más tiempo lleva en el once titular es Daniel Solsona, con veinticinco años de edad y ya ocho temporadas como blanquiazul. Una menos es el récord de José Emilio Santamaría como entrenador, marca no igualada por otro técnico de Primera División. Santamaría va tras los pasos del casi inalcanzable Miguel Muñoz, en sus tiempos felices del Real Madrid, y su dilatada presencia le sirve para conocer a la perfección la plantilla y sus posibilidades en el próximo campeonato. Hace unos meses el nombre de Santamaría se relacionó con el Real Madrid, club al que perteneció como jugador, pero la permanencia en el cargo de Miljan Miljanic le cerró el camino. Al igual que Michels y el jugoslavo, Santamaría cobra una cantidad global por temporada. Es decir, no percibe primas dobles, como es el caso del 95% de los preparadores de nuesiro fútbol.
El calendario
El Español comienza jugando en el estadio Sánchez Pizjuán, frente al Sevilla y, a continuación, tiene dos partidos en su feudo, contra dos rivales muy fuertes: Athletic de Bilbao y Real Madrid. Estos tres primeros encuentros marcarán la pauta de su posterior comportamiento. Santamaría y los directivos se han quejado del calendario, considerando que la suerte no les ha sido propicia, pero lo cierto es que eso nunca se puede asegurar. El encuentro de la máxima rivalidad, contra el Barcelona, tendrá lugar el 20 de noviembre, en terreno españolista, y a la jornada siguiente le esperará como nuevo plato fuerte, en el Manzanares, el Atlético de Madrid.
La plantilla completa del equipo es la siguiente:
Porteros: «Gato» Fernández (paraguayo), Borja, Blanch y Echevarría.
Defensas: Longhi (argentino) Cayuela, De Felipe, Ferrer, Huertas, Ortiz Aquino (paraguayo), Padilla, Lanchas y Verdugo.
Centrocampistas: Molinos, José Manuel, Solsona, Fernández Amado y Ozorio (paraguayo).
Delanteros: Cuesta, Caszely (chileno), Jeremías (brasileño), Angel, Flores y Marañón.
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