"El secuestrador solicitó mi mediación y la de un periodista"

El profesor Enrique Tierno Galván convocó ayer una rueda de prensa para dar cuenta de su intervención en el episodio protagonizado por el miembro de los GRAPO Luis Torrijos, quien retuvo como rehenes a siete personas durante la madrugada del sábado.

El presidente del Partido Socialista Popular, según manifestó en el diálogo mantenido con los informadores, estaba leyendo en su casa cuando a las tres de la madrugada le llamó la policía y le explicó las condiciones que había puesto Luis Torrijos para entregarse. En ellas se requería la presencia de un abogado conocido, un notario y un documento garantizando su seguridad.«Encontrar un notario en un fin de semana y en agosto -comentó el señor Tierno, según recoge Cifra» es, como puede imaginarse, imposible. Así que al cabo de una hora, cuando estaba el documento redactado hablé con Luis preguntándole sí aceptaría un periodista. Estuvo de acuerdo y pedí a la redactora de EL PAIS Soledad Alvarez-Coto si quería acompañarme a subir al piso para recoger al GRAPO. Le pedí además que viniese con una máquina de hacer fotos. Soledad, cuya conducta creo deben ustedes alabar, afirmó, que estaba dispuesta a venir conmigo y eso hicimos.»

«Cuando llegamos al piso -continuó diciendo el profesor Tierno- le leimos el documento, le pedí que dejase la pistola y emprendimos la bajada, no sin que antes Luis y los habitantes del piso se despidiesen con sendos besos. »

El profesor Tierno añadió que le había prometido a Luis Torrijos que iría a verlo todos los días a la Dirección General de Seguridad hasta que nombre un abogado defensor y «para que compruebe, señala Europa Press, que esas cosas de torturas y de martirios no le vana ocurrir». Finalmente, comentó que trataría de localizar a la compañera del detenido, para tranquilizarla, ya que está a punto de dar a luz.

Enrique Tierno visitó ayer al detenido en la Dirección General de Seguridad, y -según nos manifestó- le encontró muy preocupado, aunque sereno e incluso a veces sonriente. Torrijos informó al profesor de que el trato por parte de la policía venía siendo correcto, y le pidió que se hiciera cargo de su defensa, pues no tenía aún abogado. El profesor Tierno está dispuesto a defender al detenido, él mismo o cualquier abogado de su partido. Torrijos pidió también al profesor que le informara sobre su mujer.