"Prohibir Montejurra es legitimar a los fascistas"

«No podemos creer que el Gobierno prohiba la celebración del Vía Crucis de Montejurra. Sería la primera vez en cuarenta años que sucede una cosa semejante y supondría, además, legitimar la acción de las bandas fascistas armadas que actuaron el año pasado», dijo José María Zavala, secretario general del Partido Carlista, durante la rueda de prensa que miembros de la ejecutiva de dicho partido ofrecieron ayer tarde.

Zavala, que dijo no haber recibido aún ninguna comunicación oficial al respecto, afirmó que las presuntas razones que se aducían -«evitar sucesos como los del año pasado»- carecían de lógica. «Es como si un día alguien acudiera con una pistola al Consejo de Ministros y el Gobierno decidiera suspenderlos para evitar incidentes», añadió. El Partido Carlista había preparado un servicio de orden interno de mil militantes del Partido Carlista de Euzkadi. «Estamos, seguros de que este año no hará acto de presencia la Internacional Fascista, y de que si alguien causa problemas, las fuerzas del orden público sabrán actuar, no como en 1976, en que se inhibieron. Afortunadamente, hoy no es ministro de la Gobernación Manuel Fraga.»En relación con la no legalización de su partido, los miembros de la ejecutiva del PC presentaron un escrito dirigido a la opinión pública en el que señalan que hasta el Sábado de Gloria se encontraban en la misma situación que el Partido Comunista de España. «Han transcurrido dos semanas desde entonces sin que el Gobierno nos haya dado explicación alguna de por qué no nos legaliza a nosotros», añaden. El PC considera que la Oposición democrática estableció el compromiso formal de no aceptar un planteamiento democrático por parte del Gobierno -dice el comunicado- sin el reconocimiento de todos los partidos poli ticos y organizaciones sindicales. Estas dos condiciones no se han dado.

Según la ejecutiva del PC, los carlistas seguirán actuando como si el partido estuviera legalizado, participando en todas las actividades políticas con normalidad y sin caer en la trampa de la clandestinidad. Aunque no esté legalizado piensa acudir a las elecciones, si bien lo hará entonces en listas de independientes o de coaliciones; en Euzkadi, por ejemplo, el PC patrocina la creación de un bloque autonómico (abertzale) que defienda la integridad del pueblo vasco, incluida Navarra, según dijo Mariano Zufía.

Interrogado sobre si el principal motivo de su no legalización lo constituía un problema dinástico, Zavala afirmó que en los estatutos del partido no se alude a la forma del Estado ni a ninguna persona física. «Nos consta, sin embargo, que sin razón jurídica en las alegaciones del abogado del Estado ante el Supremo, se decía que los carlistas proponíamos otra Monarquía presidida por don Carlos Hugo, que no era español.» Para el PC, el hecho de que don Carlos Hugo no posea la nacionalidad española es sólo imputable a la Administración de nuestro país. «Hace quince años que la viene solicitando, recibiendo por contestación el silencio administrativo», explicaron.

Por último, se hizo pública una carta dirigida por José María Zavala a todos los líderes de la Oposición democrática, y se puso de manifiesto la necesidad de una solidaridad activa y no sólo formal de los partidos legalizados para con los que aún no lo han sido.