Reforma Social Española, disconforme con algunos de sus aliados

La Unión Electoral del Centro Izquierda (PSOE histórico, Reforma Social, Partido Socialista Democrático y Federación Socialdemócrata) celebró el pasado domingo un mitin en el barrio madrileño de Carabanchel. Como consecuencia del mismo, la comisión ejecutiva nacional de Reforma Social Española (RSE), que preside el señor Cantarero, ha acordado que ningún miembro de este partido podrá tomar parte en actos conjuntos con los demás grupos citados, «hasta que los órganos de coordinación de ambas formaciones no delimiten sus respectivas posiciones políticas».Al parecer, el conflicto ha surgido como consecuencia de la intervención en dicho mitin del señor Murillo, secretario general del PSOE histórico, quien además de protestar por la no legalización de varios partidos, expresó el rechazo de su grupo a las injerencias de socialistas extranjeros en la vida política española, que, a la hora de la verdad, sólo defienden los intereses de las grandes compañías internacionales.

Esta declaración, y algún ataque de tipo personal, ha movido a RSE a tomar la decisión antedicha. Hoy se reúne el comité de enlace formado por los grupos citados, y parece que en el mismo se pedirán explicaciones en torno a la razón de que algunas intervenciones no se ajusten a los esquemas previamente trazados, según fuentes de RSE.

Las mismas fuentes no rechazaron la posibilidad de un acercamiento a otras formaciones socialistas, dado que «el socialismo puede hacer mucho si está unido».

Por otra parte, la Federación Socialdemócrata ha anunciado su primer congreso para los próximos días 1 y 2 de abril. Se discutirán y aprobarán las ponencias siguientes: manifiesto socialdemócrata, programa electoral, reforma institucional, reforma legislativa, reforma administrativa, política de Gobierno y organización de la federación.