Rep, Diarte y Kempes, amenazas para el Atlético

Luis Aragonés no decidirá la alineación que esta tarde presente su equipo en Mestalla hasta poco antes de que comience el encuentro. En Valencia el cielo amenaza lluvia y el técnico rojiblanco desea cerciorarse de las condiciones del terreno de juego para confeccionar el once inicial. No obstante, es probable que al tercer clasificado de la Liga se le enfrente el siguiente equipo: Reina: Marcelino, Eusebio, Pereira, Capón: Alberto, Robi, Leal: Aguilar, Rubén Cano y Ayala. En condición de suplentes se sentarían, en tal caso: Pacheco, Benegas, Heredia y Bermejo.

El ambiente en la expedición rojiblanca. si no llega a rozar el concepto de euforia, tras el 4-0 logrado ante el Madrid el pasado domingo, sí responde a la idea de optimismo. A ello ha contribuido una circunstancia personal de sus componentes, Ayala cumplió ayer 26 años.

A Luis le preocupa sobremanera la línea de ataque del Valencia. Diarte figura en la tabla de goleadores igualado con Clares, en lo más alto, con catorce tantos conseguidos: Kempes, con once; y Rep, con cuatro. El marcaje de Diarte «el lobo», la pesadilla de cualquier equipo, correrá sin género de dudas a cargo de Eusebio. Rep y Capón son ya viejos conocidos de anteriores campeonatos de Liga. Luis parece haber destinado a Marcelino para hacer sombra a Kempes.

En la línea de medios es probable que dé entrada a Alberto —titular fijo—, Robi, un hombre que frente al Madrid dio muestras de querer ganarse la titularidad a toda costa, y Leal, un jugador que ha resuelto en ocasiones situaciones comprometidas.

El terceto de ataque, con la ausencia obligada de Leivinha, será el mismo que jugó frente al Madrid. Aún falta por saber, no obstante, si Ayala ha superado una colitis que le aquejaba desde hace tres días. En el Valencia la alineación está prácticamente decidida: Balaguer: Carrete, Castellanos, Cordero, Cerveró: Saura, Tirapu, Juan Carlos: Rep, Diarte y Kempes. En el banquillo se sentarán Marro. Martínez, Arias y Valdez. Se espero un lleno en el Luis Casanova, pese a los elevados precios.