Comienzo arrollador de Carter

A la hora de cerrar esta edición, cuatro de la madrugada, los votos electorales de ambos candidatos, sobre un total de 528 y con un mínimo de 270 para alzarse con la presidencia, son los siguientes: Carter, 124 votos electorales; Ford, 33 votos.En la larga madrugada de hoy, 3 de noviembre de 1976, la encarnizada lucha entre los dos candidatos presidenciales de Estados Unidos seguía desarrollándose. Y ya se avanzaban los primeros resultados «seguros», avalados por algunas cadenas de televisión (CBS, entre ellas).

, Las cosas estaban así a las cuatro de la madrugada: Carter ganaba por el 52% , mientras que Ford perdía por el 47 %. Escasa diferencia, desde luego. Pero significativa, aunque faltasen los estados claves (California, Nueva York, Pennsylvania, Texas e Illinois). Texas, a las horas en que escribo estas líneas todavía está en el alero, aunque algunas aproximaciones aseguran que «pertenece» ya a Carter.Por de pronto «Jimmy» tiene ya Kentucky, Virginia Occidental, Alabama Georgia- (su estado), Massachusetts (el estado de los Kennedy), Columbia, Florida, Carolina del Norte, Arkansas y Carolina del Sur.

Pese a que ya comienzan a oírse los primeros gritos victoriosos de los demócratas, es demasiado pronto para asegurar la victoria de Carter, Ford gana en Kansas, Oklahoma, Virginia, Pennsylvania y Connecticut (que parecía un feudo de Carter) y tiene ventaja en Pennsylvania.

Significativo parece, por ejemplo, que en Michigan, el estado originario de Ford, gane por ahora con un 59 % Carter.

Desde el punto de vista de los votos electorales la relación se muestra también favorable a Carter: 107 a su favor y veinte para Ford.

Resumiendo -aunque sea prematuro resumir nada a estas horas- los estados del Sur son para Carter, alguno de los decisivos (Pennsylvania e Indiana) para Ford, y especialmente significativo, la gran sorpresa de la noche la constituye Virginia que tradicionalmente demócrata ha sido ganada por Ford.

El New York Times recogiendo la gran sorpresa de estas elecciones -la participación masiva, la derrota del abstencionismo- titulaba en las primeras ediciones de hoy: «Asombrosa cantidad de electores ».

En casi todo él país los colegios se encuentran cerrados ahora mismo. La tarea del recuento electoral se realiza con relativa velocidad gracias a los nuevos sistemas de procesamiento de datos. En muchos estados las «máquinas de votar» han cumplido perfectamente su cometido y la cuantificación de votos ha sido mucho más fácil. Las cadenas de televisión siguen segundo a segundo el recuento mientras que los principales periódicos han comenzado a sacar sus primeras ediciones. Algunos como el Post o el NYT harán no menos de cinco y probablemente más.

En resumen: aunque Carter parece a estas horas el vencedor, nadie podría ser lo suficientemente osado como para asegurar que es el nuevo presidente de Estados Unidos. La batalla sigue. Será larga. Sólo en las primeras horas de la mañana española habrá resultados seguros. Mientras tanto, todo el mundo (nunca mejor dicho), espera.