México tiene cinco campeones mundiales
La existencia de dos organismos que engloban el boxeo mundial y la posibilidad de cada campeón de exponer su título voluntariamente antes de hacerlo ante el aspirante oficial, hace que sea muy difícil para el aficionado seguir de cerca el curso de los títulos de cada categoría. EL PAIS se propone, periódicamente, poner al día el lector en este aspecto.Es preciso hacer algunas aclaraciones al cuadro que a continuación publicamos. Hay que señalar, en principio, que ni el boxeo profesional español ni el europeo admiten la categoría de los minimoscas, y por tanto no hay campeones en esta categoría, ni español ni continental. En cuanto a los supergallos, es categoría que sólo existe para el Consejo Mundial. La denominación superligeros es equivalente a la de welters-juniors. Ambas se utilizan indistintamente. Aquí utilizaremos siempre la de superligeros porque parece haberse extendido más.
En los campeones españoles hay que señalar que la ciudad que aparece al lado del nombre de cada campeón no es necesariamente la de su nacimiento (es más, sólo lo es en los menos de los casos), sino la de aquella ciudad en la que se entrena, en la que vive y en la que está su preparador. Es decir, aquella ciudad que le sirve de base para su preparación.
En el apartado de los campeones de Europa, es de señalar que destaca Italia, con cinco títulos. Inglaterra tiene dos, y uno, Bulgaria, Turquía, Francia y España. El inglés Joe Bugner debe poner en juego su título ante el español Urtain, que ya ha sido campeón de Europa en dos ocasiones, antes de fin de año, y se habla insistentemente de que Cotena puede poner en juego su título, de forma voluntaria, ante Cabezas, otro púgil español. En cuanto a nuestro único campeón europeo actual, Perico Fernández, defenderá su título ante el italiano Usai. La pelea se hará el próximo día 10 de noviembre en Bilbao.
Dominio americano
En cuanto a los títulos mundiales, está claro que el dominio pertenece al boxeo americano. La pegada y la agresividad son verdades más contundentes que ninguna otra en este deporte. El boxeo americano, de siempre, ha producido terribles pegadores, hombres con más preocupación por el ataque que por la defensa. México y centro y Suramérica, además, suponen toda una inmensa zona aún sin desarrollar económica y culturalmente, hecho éste que favorece la práctica del boxeo. Manda México con cinco campeones. Sigue Argentina, con cuatro, y Puerto Rico y USA, con tres. (Contamos como dobles, porque así lo son los títulos de Clay y Monzón, Ios dos más grandes campeones del momento, y los acaso dos únicos de todo el cuadro que pasarán a la leyenda del boxeo profesional.) Japón sólo tiene, en este momento, dos campeones. Es normal que tenga más. El resto de los títulos están repartidos. España tiene su representante, con Miguel Velázquez, campeón de los superligeros para el Consejo. Velázquez expondrá a fin de mes, acaso en Segovia, su título mundial ante San Sak Muangsurin, justamente el hombre al que se lo arrebató por descalificación.
Próximas defensas
El cuadro se mueve con frecuencia. De momento, este fin de semana puede haber variaciones. Esta noche, Roberto «Mano de Piedra» Durán, un hombre que de 55 combates sólo ha perdido uno (con Estebán de Jesús, campeón del Consejo) y que ha ganado 45 veces antes del límite, expone su título. Alvaro Rojas, costarricense, es su retador. También Mate Parlov, yugoslavo, campeón olímpico ya como semipesado y que ganó a Adinolffi en discutibles condiciones, defiende su título ante otro italiano, Adolfo Traversaro. Por último, están pendientes los casos de Alexis Argüello y del genial Clay. Ambos tienen anunciada su retirada. Si ésta se confirma, sus títulos quedarían vacantes y habría que buscarles sustitutos.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.