Augusto Delkader,
hasta hoy redactor-jefe de EL PAIS, tomará posesión en unas fechas como director de Diario de Cádiz. A los veinticinco años, este singular gaditano ha encontrado tiempo hasta para casarse. Estudió Periodismo y Derecho en Madrid, Y Filología inglesa en la Regent School de Londres. Secretario de redacción en Apuntes Universitarios, pasó a la revista Gentleman como redactor-jefe y, posteriormente, a la subdirección de Diario de Cádiz. EL PAIS lo captó para hacer una de las cosas más difíciles y más bonitas que pueden hacerse en esta profesión: fundar un periódico. Y este periódico -perdónesenos sólo esta vez el orgullo- se hizo con profesionales como Delkader. Gentes con nervio y una ilimitada capacidad de ilusión. Augusto Delkader aportó a este periódico su brillantez, su pluma, su nivel de información, sus conocimientos técnicos y el tremendo empuje de su juventud. Diario de Cádiz, en suma, ha de estar enhorabuena.
